La reactivación de las actividades económicas es uno de los problemas más importantes en todas las naciones, sobre todo porque l COVID 19 es una amenaza sobre todo en América.
El Político
Encender –aunque a baja intensidad– los motores económicos del país significa, que el duro aunque necesario confinamiento, que ha tenido que ser prorrogado hasta en tres ocasiones, ha comenzado a pasarle la factura a muchas familias y empresas que, aun cuando no sea en las cantidades o el ritmo de antes, necesitan volver a generar ingresos pronto.
Todo parece indicar que el coronavirus y otros males seguirás con nosotros todavía durante algún tiempo, mientras que el azote económico que ha generado ha empezado a mostrar algunas cifras alarmantes.
La presión a los gobiernos está aumentando para que expliquen cuáles son planes debido a los crecientes costos económicos de las medidas diseñadas para contener el coronavirus. También hay temores de que los suministros de alimentos y las disposiciones de atención médica puedan verse afectados si las restricciones permanecen vigentes durante demasiado tiempo.
Mientras Europa planifica cuidadosamente su activación de turismo, algunos Estados norteamericanos inician estrategias comunes de activación,pero tal como lo dice la canciller alemana, "no podemos echar por la borda lo que hemos logrado".
En Alemania, donde 101.000 personas han resultado positivas por coronavirus y más de 1.600 han muerto, un grupo de economistas, abogados y expertos médicos recomiendan una recuperación gradual de la economía más grande de Europa que permitiría a industrias y trabajadores específicos reanudar sus actividades mientras se toman medidas para prevenir un resurgimiento del coronavirus.
Una docena de académicos escribieron en el informe, publicado la semana pasada por el Instituto Ifo de Investigación Económica, que no esperan que haya una vacuna o un tratamiento efectivo contra el coronavirus antes de 2021. Como resultado, Alemania debería abordar la lucha contra la enfermedad “más como una maratón y menos como una carrera a toda velocidad”.
“La planificación de esta transición debe comenzar de inmediato en la política, la administración, las empresas y otras organizaciones”, añadieron.
Reabrir tiendas y comercios no esenciales debe hacerse con medidas sanitarias que apuntan a limitar la propagación del virus, porque la preocupación cardinal en estos momentos es salvaguardar la salud de las personas.
Corresponde a las empresas y organizaciones incorporarse a la vida económica garantizando las normas de protección De hecho la economía informal tan común en América ya está funcionando a media máquina.
El informe de Ifo sugiere que el país ahora debería crear un grupo de trabajo nacional de expertos y representantes públicos que haría recomendaciones sobre cómo aliviar las restricciones en el trabajo y la vida pública, y cuándo deberían las industrias reiniciar la producción. Regresar al trabajo sería voluntario para los empleados.
Las industrias como las telecomunicaciones y la producción automotriz que agregan el mayor valor a la economía deberían tener prioridad, según el reporte, mientras que el trabajo que puede hacerse fácilmente desde casa debe continuar de forma remota. Las guarderías y las escuelas abrirían relativamente rápido, porque los jóvenes rara vez tienen síntomas graves y los padres no pueden trabajar si las instalaciones de cuidado infantil y las escuelas permanecen cerradas.
Nada de discotecas ni grandes eventos
Las compañías que fabrican productos o componentes de salid también deberían reabrir rápidamente, mientras que a los hoteles y restaurantes solo se les permitiría hacerlo de una “manera muy cuidadosa y controlada” porque es difícil para las personas mantener la distancia en dichos establecimientos. Las discotecas y los clubes deberían permanecer cerrados por el momento, según el reporte, y los eventos con una gran cantidad de espectadores no deberían realizarse.
Los expertos dicen que es posible que se establezcan diferentes medidas en distintas regiones. Las restricciones podrían flexibilizarse primero en lugares con bajas tasas de infección o con un riesgo reducido de transmisión, como las comunidades rurales. A medida que pasa el tiempo, las regiones donde la población ha acumulado un cierto grado de inmunidad podrían operar con menos restricciones.
“El intento de controlar centralmente la reanudación de la producción… no funcionaría en la práctica. Esta reanudación debe ser controlada principalmente por las propias instituciones y empresas”, aclaró el informe.
El Dr. Anthony Fauci, principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, dijo recientemente que, si bien la salud pública es su máxima prioridad, mantener a la sociedad y la economía en un confinamiento total durante demasiado tiempo tendría consecuencias negativas involuntarias.
Y el ex primer ministro británico Tony Blair dijo a la BBC este lunes que estaba “aterrorizado” por el daño económico que las medidas de confinamiento estaban causando a la economía del Reino Unido, estimado por el Centro de Investigación Económica y Comercial en 2.900 millones de dólares por día.
“Si continúa durante un largo período… también afecta la capacidad para operar el sistema de atención médica de manera efectiva”, señaló Blair.
En conclusión, tendrá que ser un proceso participativo y selectivo, acorde con la realidad década Nación y desarrollado de abajo hacia arriba, es decir, todas la decisiones no las podrán tomar los gobernantes.
Con información de CNN y Diario El Comercio de Perú