China publicó las primeras imágenes que envió su robot explorador Zhurong desde Marte. El pasado fin de semana aterrizó en el planeta rojo la sonda china Tianwen-1, con este robot marciano chino, que en sus primeras fotografías muestra el paisaje que tiene por delante mientras se encuentra sobre la plataforma de aterrizaje.
El Político
En otra imagen se puede ver la vista hacia atrás del robot en la que se revelan los paneles solares de Zhurong. Este robot explorador aterrizó en el planeta rojo el pasado domingo temprano según el horario local de Pekín.
Los científicos chinos esperan obtener al menos 90 días marcianos de servicio del robot de seis ruedas en su ubicación en Utopia Planitia, un vasto terreno en el hemisferio norte del planeta, reseña la BBC.
En el material de la CNSA también se pueden ver algunos videos cortos. En ellos, se muestra el momento en que el aeroshell del robot, la cápsula que usó para ingresar a la atmósfera marciana, sale del orbitador Tianwen-1, el satélite que transportó al robot desde la Tierra.
Aterrizaje sin novedad
De acuerdo con las imágenes, las implementaciones de hardware críticas después del aterrizaje se completaron sin dificultades. Las maniobras incluyen el despliegue de los paneles solares para proporcionar energía al robot; el lanzamiento de la antena para comunicarse con Tianwen-1, y en adelante con los controladores en China; y la extensión de la rampa por la que pronto rodará Zhurong para comenzar su misión móvil, explica la BBC.
Zhurong tiene parecido con los vehículos Spirit y Opportunity que la agencia espacial estadounidense (Nasa) presentó en la década de 2000; y un peso de 240 kilogramos. Un mástil alto lleva cámaras para tomar fotografías y ayudar a la navegación; cinco instrumentos adicionales investigarán la mineralogía de las rocas locales y la naturaleza general del medio ambiente, incluido el clima.
También cuenta con una herramienta láser para penetrar rocas y evaluar su química; al igual que los exploradores estadounidenses actuales. Asimismo, está equipado con un radar para buscar hielo de agua debajo de la superficie, una capacidad que sus primos estadounidenses no comparten.
Utopia Planitia es la zona donde la Nasa aterrizó su misión Viking-2 en 1976. Es una cuenca colosal, de más de 3.000 km de diámetro, que se formó por un impacto a principios de la historia de Marte.
Algunas evidencias apuntan a que tuvo un océano hace mucho tiempo. La teledetección por satélites indica que hay importantes reservas de hielo en profundidad.