Al menos 75 legisladores del Congreso han alzado la voz para que se emitan de forma regular controles de estímulo hasta que termine la pandemia.
El Político
Los legisladores han instado al presidente Joe Biden a incluirlos en el plan de infraestructura de $2,3 billones de dólares.
Esta no es la primera vez que los representantes hacen este llamado, en enero, 56 demócratas de la Cámara de Representantes enviaron a Biden una carta instándolo a considerar pagos de estímulo recurrentes, reportó La Opinión.
75 legisladores presionan
En aquella misiva los firmantes expusieron que el país vive “la peor crisis económica desde la Gran Depresión, con millones de desempleados, obligados a dejar la fuerza laboral o enfrentando una disminución en las horas y los salarios”.
La petición actual de los congresistas tiene ver con datos revelados por el Centro de Política Fiscal de Urban-Brookings, que sostiene que un cuarto control de estímulo podría sacar a más de siete millones de personas de la pobreza en todo el país.
Una encuesta del buró de crédito TransUnion reveló que millones de estadounidenses todavía se encuentran en dificultades financieras, donde cuatro de cada 10 dicen que sus ingresos se mantienen por debajo de los niveles previos a la pandemia.
Legisladores exigen más ayuda
A finales de marzo, 21 senadores demócratas se unieron al coro de voces que pedían más pagos.
“Las familias no deberían tener que preocuparse por si tendrán suficiente dinero para pagar los artículos esenciales; en los próximos meses”, escribieron los senadores a Biden en una carta separada.
Muchos hogares han utilizado el dinero de estímulo para cubrir gastos básicos, como alimentos y alquiler; con base en un estudio de la Oficina de Estadísticas Laborales sobre cómo se gastaron los primeros cheques del año pasado.
Oposición de muchos
Pese a los números que se han expuesto oficialmente, liberar un cuarto cheque de estímulo o permitir cheques recurrentes; enfrentan una oposición de muchos legisladores e incluso de miembros de los demócratas.
Para los opositores el que el gobierno proporcione más pagos directos implicaría una enorme carga a las finanzas públicas; incluso sectores del partido republicano han dicho que eso representaría más deuda para el país.