El líder kurdosirio Saleh Muslim rechazó este martes la orden de arresto emitida contra él por Turquía y negó cualquier implicación suya en el atentado registrado en Ankara de febrero pasado del que se le acusa.
"Esa no es una orden de detención real y nosotros no tenemos nada que ver con ese atentado", dijo a Efe el presidente del Partido de la Unión Democrática (PYD, en sus siglas en kurdo), principal formación política kurdosiria, en conversación telefónica.
Muslim es una de las 48 personas supuestamente vinculadas al proscrito Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK) contra las que la Fiscalía turca ha emitido órdenes de captura y arresto por su supuesta implicación en un ataque con coche bomba perpetrado en Ankara en febrero, que causó 28 muertos y más de 60 heridos.
"Todo el mundo sabe quiénes somos, nosotros estamos luchando contra el terrorismo del ‘Dáesh’ (acrónimo en árabe del Estado Islámico) y del Frente al Nusra (exfilial siria de Al Qaeda)", apuntó Muslim, que actualmente se encuentra de visita en Londres.
El dirigente kurdosirio señaló que todavía no ha contactado con sus abogados para ver qué pasos van a adoptar a partir de ahora.
El atentado de Ankara fue en su día reivindicado por el grupo TAK (Halcones de la libertad del Kurdistán), formación escindida del PKK, aunque según el Gobierno turco se trata simplemente de una "marca" de la guerrilla kurdoturca usada en ataques con víctimas civiles.
Las autoridades turcas también consideran al PYD una mera "rama siria" del PKK, pese a que el partido kurdosirio y su brazo armado, las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo) reciben apoyo de EEUU para su lucha sobre el terreno contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
Muslim mantenía hasta 2014 reuniones con las autoridades turcas en Ankara, pero las relaciones entre el PYD y el Gobierno turco se deterioraron de forma definitiva tras el fin del alto el fuego con el PKK en julio de 2015 y el surgimiento de un movimiento juvenil de la guerrilla kurda en las ciudades del sureste de Turquía, que supuestamente recibía apoyo desde las milicias kurdosirias.
Con información de EFE
