Sergei Shoigu, ministro de Defensa ruso, ordenó la retirada de las tropas rusas de la ciudad de Jersón, ocupada en los primeros días de la invasión a Ucrania.
El Político
El comandante de las fuerzas rusas en Ucrania, el general Sergei Surovikin, reconoció que ya no era posible para sus unidades mantener los suministros en la ciudad e intentar al mismo tiempo repeler los ataques del ejército ucraniano.
En una reunión con los altos mandos militares, Surovikin dijo que "en estas circunstancias, la opción más sensata es organizar la defensa a lo largo de la otra orilla del río Dnipro". Este planteamiento fue aceptado por Shoigu.
¿Por qué es importate?
La llegada del invierno ralentizará las operaciones ofensivas, pero los ucranianos han señalado que seguirán haciendo retroceder a los rusos.
La decision significa que las fuerzas rusas se retirarán por completo de los territorios que ocupan en la orilla occidental del río Dniéper.
El Ministerio de Defensa ucraniano afirmó que, hasta el domingo, las fuerzas ucranianas habían matado a unas 84.210 tropas rusas (y herido aproximadamente el triple), habían destruido 278 aviones de combate, de ataque, de bombardeo y de transporte, 261 helicópteros de ataque y de transporte, 2.886 tanques, 1.868 piezas de artillería.
También 5.817 vehículos blindados de transporte de personal y vehículos de combate de infantería, 393 sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS), 16 barcos y cúteres, 4.371 vehículos y tanques de combustible.
Asimismo, acabaron con 209 baterías antiaéreas, 1.537 sistemas aéreos tácticos no tripulados, 161 plataformas de equipos especiales, como vehículos puente, y cuatro sistemas móviles de misiles balísticos Iskander, y 480 misiles de crucero derribados por las defensas aéreas ucranianas.
Entre contexto
Jersón fue la primera gran capital ucraniana en caer en manos rusas tras la invasión del pasado 24 de febrero, un hecho que supuso un duro revés para el gobierno de Kyiv, el cual desde entonces ha fijado como meta su recuperación.
La ciudad y la provincia homónima son de especial importancia, porque limita con la península de Crimea, que Moscú se anexionó ilegalmente en 2014 y además la suministra de agua.
La recuperación de la zona es crucial para el gobierno del presidente Volodimir Zelenski, por cuanto le permitiría reafirmar el control ucraniano sobre el mar Negro y sobre otras localidades estratégicas como el puerto de Odesa.
Continúan los ataques rusos. Durante la noche, el ejército ruso llevó a cabo un ataque aéreo contra la fábrica de montaje de motores de aviación Motor Sich en Zaporizhzhia, reportó IsraelNoticias.
Los militares rusos utilizaron sistemas aéreos no tripulados, muy probablemente el Shahed-136 iraní, para acabar con el taller de montaje de motores de aviación.
Antes de la invasión rusa de Ucrania en 2014, que anexionó Crimea y ocupó grandes trozos del Donbás, los militares rusos compraban regularmente motores para varios tipos de aviones, helicópteros y misiles de crucero.
Las fuerzas rusas han hecho un uso intensivo de los drones iraníes que recibieron de Teherán. Los drones suicidas Shahed-136, que están diseñados para misiones de un solo sentido, se han utilizado contra centros urbanos ucranianos, infraestructuras críticas y objetivos industriales.
Moscú y Teherán han llegado a un acuerdo para la fabricación de drones, como el Shahed-136, en suelo ruso, según la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos.
En conclusión
A medida que las fuerzas rusas retroceden cada vez más en todo el campo de batalla, el Kremlin ha estado empleando drones y misiles suicidas con mayor frecuencia en un intento de frenar el flujo de las contraofensivas ucranianas y también de lograr algunas victorias psicológicas.
Aunque las fuerzas rusas se retiraron de la orilla occidental de la provincia de Kherson y de la ciudad de Kherson, la capital de la provincia, la retirada se produjo en buen orden, lo que fue una novedad para los militares rusos hasta ahora. Las retiradas de Kiev, Kherson y Kharkiv fueron todas
“Durante la retirada, las pérdidas de vehículos fueron probablemente de decenas y no de cientos, mientras que gran parte del material que quedó atrás fue destruido con éxito por las fuerzas rusas para negárselo a Ucrania. Es probable que este éxito relativo se deba en parte a un mando operativo único más eficaz bajo el mando del general Sergei Surovikin", evaluó la Inteligencia Militar británica en su última estimación de la guerra.
Sin embargo, la fuerza sigue dividida por un pobre liderazgo de nivel medio y subalterno y una cultura de encubrimiento”,
Un dato a considerar es que desde finales de verano las fuerzas ucranianas han lanzado una contraofensiva que ha incluido ataques como los Himars (sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad, por sus siglas en inglés) suministrados por Estados Unidos, con drones e infantería, lo que le ha permitido recuperar parte del territorio perdido en las últimas semanas.