Francia vive un momento delicado en el que tanto trabajadores como estudiantes tienen un mismo objetivo: El rechazo a la reforma de pensiones presentada al Parlamento por el presidente, Emmanuel Mascron.
El Político
Este miércoles se realizaron gigantescas manifestaciones, anuncian otras para dentro de dos días, que a juicio de los convocantes, superarán las del 11 de febrero pasado. Las protestas relacionadas con el sistema de pensiones llevan varios meses.
La de este martes es considerada la mayor protesta contra la reforma de las pensiones del presidente liberal Emmanuel Macron, 1,28 millones de manifestantes, según las autoridades, y 3,5 millones, según la CGT.
Sectores clave como la energía y el transporte son los más afectados. Este miércoles los sindicalistas bloquearon de nuevo la expedición de combustible de las refinerías, los depósitos de gas y cuatro terminales.
Los sindicatos convocaron nuevas protestas el sábado y la próxima semana (probablemente miércoles) a llamado de organizaciones juveniles.
Lo que dicen los sindicatos
En una carta dirigida al presidente de la República y a la que Le Parisien tuvo acceso, los responsables de los ocho sindicatos interprofesionales y cinco sindicatos estudiantiles y de alumnos de secundaria piden reunirse con el mandatario lo antes posible para discutir la reforma de las pensiones. La misiva se le hizo llegar al mandatario galo mientras la movilización sigue activa.
“Como saben, este proyecto (…) es rechazado por todas las organizaciones sindicales que piden su retiro”, denuncian los dirigentes de la CGT, la CFDT, FO, la CFE-CGC, la CFTC, la Unsa.
Respaldadas además por la FSU, la Unef, la Fage, la Voix Lycéenne , la FIDL y la MNL, todas firmantes del texto.
“Usted y su gobierno guardan silencio ante la expresión de este poderoso movimiento social. Para nuestras organizaciones, esta falta de respuesta constituye un grave problema democrático, conduce inevitablemente a una situación que puede tornarse explosiva”, critica el texto.
A primera hora de la mañana, Philippe Martinez (CGT) y Laurent Berger (CFDT) habían hablado de la "indiferencia" y el "desprecio" mostrado por el Gobierno hacia ellos.
Por qué es importante
La protesta busca que el gobierno retire su plan de retrasar la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y de adelantar a 2027 la exigencia de cotizar 43 años (y no 42, como ahora) para cobrar una pensión completa.
Tras cinco masivas manifestaciones pacíficas en enero y febrero, los sindicatos decidieron intensificar su lucha, ante el rechazo del gobierno de Macron.
El gobierno escogió un polémico procedimiento parlamentario. (un proyecto rectificativo de la ley de financiación de la Seguridad Social), que limitó el tiempo de examen y facilita la aplicación del plan.
Las dos cámaras del Parlamento tienen hasta el 26 de marzo para adoptar el mismo texto. Si estas no logran pronunciarse, el gobierno puede aplicar su plan mediante ordenanza a partir de entonces, algo que nunca ha ocurrido.
Lo que estamos viendo: ¿asunto de jóvenes?
Entre los estudiantes, a los bloqueos se suman las ocupaciones. El movimiento estudiantil está evolucionando.
Además de los 23 establecimientos bloqueados, ahora hay ocupaciones . Las escuelas de arte de Burdeos, Lorient y Brest están ocupadas.
El sitio Tolbiac de la Universidad de París 1 Panthéon Sorbonne, como Sciences Po Paris, están cerrados administrativamente para evitar bloqueos.
Estudiantes universitarios y de secundaria también se están movilizando contra la reforma de las pensiones.
“La jubilación también es un asunto de jóvenes. Podemos ser el punto de inflexión, la chispa de la movilización ”, dice Eleonore Schmitt, portavoz del sindicato Alternativa.
En conclusión
Con la cuenta atrás en marcha, el gobierno busca ganar tiempo. Macron se juega parte de su crédito político, máxime cuando la pandemia le obligó a retirar la anterior reforma de las pensiones en su primer mandato.
Apuesta el Gobierno de Macrón a una "victoria por desgaste" aunque "nada indica que pueda confiar en una pérdida de impulso" de las protestas. El mandatario se centra en preparar la agenda posreforma.
El oficialismo cuenta con el apoyo de la oposición de derecha, favorable a la reforma, para aprobarla. Ese escenario evitaría que se reforzara la imagen de "autoritario" del presidente, en caso de aplicar su plan sin contar con una mayoría legislativa.
Sin embargo, las centrales están decididas a continuar incluso si la reforma se aprueba.
Fuente: Agencias