El Ayuntamiento de Madrid prevé regular a través de una reforma de su ordenanza de movilidad la actividad de las ‘bici-birras’, tras paralizar la actividad de estos polémicos vehículos turísticos inventados en Holanda en los años noventa y en los que grupos de usuarios pedalean al tiempo que beben cerveza.
Tras paralizar todas las ‘bici-birras’ la pasada semana como consecuencia de una inspección, la corporación municipal sigue alertando en contra del criterio de la empresa fabricante sobre los riesgos de este transporte.
Las muletas más ligeras del mundo son hechas en España
Fuentes municipales indican que la reforma de la ordenanza va a ser "muy completa", ya que además de las ‘bici-birras’ incluirá otro tipo de artilugios como los segways (transporte de dos ruedas con balanceo) y los patinetes. Responsables municipales mantienen estos días reuniones con diversos actores implicados en la movilidad para "recabar sus puntos de vista antes de iniciar la redacción del texto".
Las ‘bici-birras’, creadas en Holanda a finales de la década de 1990, llegaron a la capital en 2013 de la mano de la empresa How are you S. L., que opera con el nombre comercial de Bbike y ofrece otros servicios como recorridos en vespa y en ‘tuk tuk’.
"Nuestro afán es atraer a más turistas a Madrid con ofertas originales y cumpliendo siempre la legalidad", cuenta un portavoz de la compañía. Las cuatro ‘bici-birras’ que hay en Madrid, todas ellas propiedad de Bbike, fueron inmovilizadas el pasado día 15 por la Policía Municipal al no contar con certificados válidos y permanecen fuera de circulación desde entonces a la espera de una revisión.
Taxistas españoles condenan actos vandálicos
Desde el Ayuntamiento de Madrid insisten en los "riesgos" de este tipo de vehículos descubiertos, dotados de pedales y motor. Entre otros aspectos, la administración alerta de que la instalación eléctrica presenta "múltiples deficiencias", el freno de mano y las cadenas de transmisión no están protegidos y el artilugio tiene "salientes y aristas peligrosas".
Pero, según la empresa, entre los certificados reclamados por los agentes municipales figuraban los papeles del fabricante, un tipo de documentación del que no disponían; y los únicos que tiene la obligación de poseer son el manual de instrucciones y una declaración de responsabilidad de la Comisión Europea (CE). No obstante, la compañía indica que finalmente han entregado todos los papeles.
Más información en 20Minutos