En Venezuela, el régimen de Nicolás Maduro asegura haber neutralizado una conspiración en su contra, orquestada desde Colombia y EEUU.
El Político
El mandatario venezolano viene protagonizado una diatriba contra el presidente de Colombia, Iván Duque. Desde hace varios años acusa al vecino país de planear atentados en su contra, con apoyo de la Casa Blanca.
Se trata de un discurso trasnochado, que no convence a nadie. Es una de sus habituales maneras de generar polémica y distraer a la opinión pública, sobre los problemas reales que se padecen en esa nación caribeña.
Dijimos: ¡Apure es nuestro! y lo logramos. Instruí incrementar las operaciones militares y policiales a fondo, para exterminar los restos de los TANCOL a lo largo y ancho del territorio. Vamos a seguir ganando esta batalla por la Paz, la salud y la vida de nuestro Pueblo. pic.twitter.com/M17LMz77GC
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) June 3, 2022
¿Celebración?
"¡Dijimos Apure es nuestro y lo logramos!". Así se expresó Nicolás Maduro, al reunirse con la plana mayor de su generalato, para cantar victoria en la guerra de la frontera.
Apure es uno de los estados fronterizos de Venezuela con Colombia. Un área donde los grupos paramilitares se mueven a sus anchas, con la complicidad del régimen venezolano.
Maduro celebra con los militares los resultados de una supuesta Operación Escudo Bolivariano 2022. Una iniciativa que habría derrotado un plan de una intervención militar, diseñado por el gobierno colombiano de Iván Duque, con amparo de la administración estadounidense.
Según el régimen venezolano, existe una punta de lanza de los enemigos del chavismo. Son los llamados Traficantes Armados Narcotraficantes de Colombia – Tancol.
Se trata de un eufemismo inventado en Caracas, bajo el cual esconden a las guerrillas colombianas, que luchan entre ellas en el territorio venezolano.
Estos grupos irregulares buscan hacerse con el control de uno de los corredores del narco más importantes del continente.
Según el régimen de Maduro: "todos estos grupos narcotraficantes, los Tancol, responden a la oligarquía que gobierna a Bogotá, amparada desde Washington".
Presidente Maduro ordenó a la FANB incrementar acciones militares contra grupos TANCOLhttps://t.co/m0V27y5fIA#VenezuelaComunal pic.twitter.com/zDvWdkjXqj
— PSUV (@PartidoPSUV) June 3, 2022
¿Más argumentos?
Maduro incluyó en su guión trasnochado unas supuestas conspiraciones para sabotear la recuperación económica de Venezuela.
También argumenta que frenaron los ataques hacia estaciones de policías, cuarteles militares y refinerías petroleras.
Sus declaraciones se dan —curiosamente— cada vez que hay algún incidente, como el nuevo accidente registrado en la refinería Cardón, la segunda más importante del país.
Esta refinería, al igual que el resto de las instalaciones petroleras en Venezuela, están en muy mal estado.
En ellas sucedes accidentes constantemente, como explosiones e incendios de gran magnitud. Esto como consecuencia de una total falta de mantenimiento y mal manejo operacional.
Dentro de los argumentos utilizados por Maduro, para auto felicitarse, destacan —supuestamente— el haber destruido 257 campamentos, 46 pistas clandestinas, 3.400 uniformes del ejército colombiano, 26 embarcaciones.
Incluso, aseguró haber destruido hasta dos submarinos. Todo en el marco de un supuesto gran despliegue militar bolivariano, "el mayor desde la llegada del chavismo al poder, a finales del siglo pasado". Pero no existen evidencias de tales logros.
#3Jun ?️ | Maduro: “Venezuela es víctima de una agresión, a veces silenciosa, a veces abierta del terrorismo y el narcotráfico colombiano“ https://t.co/EqDDmhSMs4
— Sumarium (@sumariuminfo) June 3, 2022
Anuncio coyuntural
El anuncio de Maduro se da a pocos días de que las disidencias del Frente Décimo de las FARC reconocieran la muerte de su gran líder, Gentil Duarte.
Este falleció durante un ataque con explosivos contra su campamento cercano al estado fronterizo del Zulia venezolano.
Según los guerrilleros, quienes les atacaron fueron el ejército colombiano, en combinación con la Embajada de EEUU.
Pero fuentes de la inteligencia colombiana aseguraron con anterioridad otra cosa. Fueron sus enemigos del Ejército de Liberación Nacional – ELN, los responsables de tal ataque.
La realidad es que desde hace más de un año se desarrolla en la zona fronteriza, sobre todo en el estado Apure, un enfrentamiento a tiro limpio protagonizada por una triple alianza.
Se trata del ejército chavista, el ELN y el Segunda Marquetalia de las FARC. Los tres contra los disidentes de Duarte e Iván Mordisco, unos combates en los que incluso el chavismo han contado con apoyo de mercenarios y drones rusos.
Tamara Sujú denunció que Maduro mandó a encarcelar a 93 militares tachirenses https://t.co/KS65aZWJTS
— Noticiero Digital (@NDtitulares) June 2, 2022
Guerrilla a sus anchas
La presencia de las guerrillas colombianas aliadas de Maduro en su santuario va incluso más allá del narcotráfico.
El propio régimen les proporciona protección en las minas de oro y control social en los estados fronterizos.
En todo caso, es un combate que se ha cobrado la vida de líderes históricos de las distintas guerrillas más allá de Duarte.
A la cabeza, Jesús Santrich, eliminado por un comando desconocido. Este ex representante de las FARC en el Parlamento y uno de los jefes del equipo negociador en La Habana.
Este compartía con Iván Márquez la dirección del grupo que se oponía a alias Timochenko, al frente ahora del Partido Comunes, que apoya al izquierdista Gustavo Petro en sus ambiciones presidenciales.
También El Paisa y Romaña fueron dados de baja en estos meses.
Maduro concluyó: "el terrorismo y la violencia no se apoderarán de Venezuela. La Fuerza Armada Nacional Bolivariana – FANB y el pueblo, pondrán manos dura contra las mafias".
Además, criticó duramente que: "Washington se la pasa dándole premios, medallas y reconocimientos a Iván Duque, a todos los narcotraficantes colombianos. Los consideran sus aliados. Tenemos una batalla intensa".