Con honores fue recibido Nicolás Maduro por el presidente de Brasil Lula Da Silva. Y eso no fue lo único. Para dejar en claro su lealtad, criticó el bloqueo económico de Estados Unidos al régimen de Venezuela. Los viejos amigos de la izquierda suramericana prometieron estrechar los lazos binacionales.
El Político
Aunque fue calificada como una visita de trabajo, Maduro recibió a su llegada honores de Estado y fue esperado por Lula en lo alto de una rampa que conduce a la primera planta del Palacio de Planalto. Medio centenar de soldados con uniformes históricos formaron un pasillo de bienvenida.
Ambos destacaron la importancia del encuentro, ya que Maduro no pisaba territorio brasilero desde el gobierno de Dilma Roussef. Las relaciones binacionales estuvieron en el congelador durante el gobierno de Jair Bolsonaro, acérrimo adversario de la izquierda en cualquiera de sus versiones.
Lula consideró relevante recuperar el derecho de sostener relaciones bilaterales, mientras Maduro se mostró dispuesto a prometer el oro y el moro con tal de ser reconocido como presidente legítimo de Venezuela. Algo en lo que Lula no se demoró.
¿Derechos humanos? De eso no se habla
Comenzó por decir que "el autoritarismo en Venezuela es una narrativa construida". Con esa perla desconoció todos los informes de organismos internacionales en materia de violaciones a los Derechos Humanos.
Por si fuera poco, el mandatario brasilero tuvo críticas para quienes reconocieron el interinato de Juan Guaidó y el "intento de aislar a Venezuela".
De interés:#Lula da Silva: “Después de ocho años, #Maduro regresa a #Brasil y hemos recuperado el derecho de sostener relaciones bilaterales”. pic.twitter.com/vMoV028ZU5
— Noticias de Ucrania 24 horas (@UKR_token) May 29, 2023
Ya en el tono diplomático y convencional de este tipo de encuentros. La declaración enviada a los medios destacó que Maduro y Lula abordaron temas como integración, desarrollo económico, fronteras, protección de comunidades indígenas y del Amazonas.
???? | Lula y Maduro relanzan relaciones bilaterales entre Brasil y Venezuela. En una reunión en Brasilia, abordaron temas clave como integración, desarrollo económico y protección del medio ambiente. Se busca fortalecer los lazos entre ambos países. #Brasil #Venezuela pic.twitter.com/qcIg8S5Z7b
— CNM Global News (@CNMGlobalNews) May 29, 2023
Maduro le promete energía a Lula
Para nadie es un secreto el deplorable estado de la red de suministro energético en Venezuela. Los apagones diarios en diferentes regiones del país no son parte "de la narrativa". Son verificables en las redes sociales y en los pocos medios que no son afectos al régimen.
Lo que sí es cierto fue que no se anunció una fecha para el inicio de la supuesta cooperación energética. También se habló de la necesidad de recuperar la infraestructura en el Guri para poder asumir el desafío.
#29May #Brasil #Venezuela @VPITV: “Estamos preparados para reconstruir las líneas de transmisión a Roraima y Boa Vista. Es un compromiso reconectar el Guri con el estado brasilero de Roraima”: Nicolás Maduro tras firmar acuerdo con Lula da Silva. pic.twitter.com/rEYXgQdJx9
— Reporte Ya (@ReporteYa) May 29, 2023
Sustituir al dólar
Uno de los deseos más vehementes de los gobiernos que tienden a la izquierda es poder derrotar el poder del dólar estadounidense como moneda fuerte. No es de extrañar que en una cumbre de mandatarios suramericanos encabezada por Lula y con participación de Maduro se promueva una moneda regional que permita comerciar sin recurrir a la divisa estadounidense.
“Sueño con que tengamos una moneda entre nuestros países para que podamos hacer negocios sin depender del dólar. Porque el dólar pertenece a Estados Unidos y puede hacer lo que quiera con él”, dijo Lula en declaraciones reseñadas por AP.
Pero es muy pronto para cantar victoria en cuanto a esa moneda. Las golpeadas economías de las naciones no están como para sus presidentes se enfrasquen en ese debate. Hay asuntos más urgentes que atender como alta inflación, pobreza en crecimiento y caída del PIB en los países suramericanos.
Fuente: El Cooperante