El magistrado Alejandro Rebolledo aseguró que en Venezuela “existe una estructura criminal que opera desde el Estado y "ha contaminado a todos los sectores del país".
El Político
El especialista en prevención de delincuencia organizada dijo que en Venezuela todos los poderes han sido contagiados por la corrupción. "Antiguamente combatíamos a las llamada cúpulas podridas de la corrupción, hoy toda la estructura está contaminada. No solo las cúpulas”
En ese orden, señaló que los corruptos en cargos de alta gerencia son difíciles de identificar porque son capaces de montar estructuras que permiten blindarse para evitar ser investigados.
Afirma que "la corrupción es una contaminación mundial que no tiene color político sino aliados de turno. Lo más importante en la lucha contra la corrupción es la recuperación de los bienes"
Según explica el magistrado venezolano, en Venezuela, el modelo socio económico que acompaña al régimen político está hecho para la corrupción” .
Es de hacer notar que la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 9 de diciembre como el Día Internacional contra la Corrupción, para despertar conciencia sobre este flagelo.
La campaña global #UnitedAgainstCorruption #UnidosContraLaCorrupcion se enfoca en la corrupción como uno de los obstáculos más grandes para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Según la ONU, gobiernos, sector privado, organizaciones no gubernamentales, medios de comunicación y ciudadanía alrededor del mundo están uniendo esfuerzos para combatir la corrupción en favor de las personas, el planeta, la prosperidad, la paz y la colaboración. La corrupción es una trampa que financia los delitos de trata de personas, tráfico de armas, drogas y vida silvestre, y destruye el contrato entre la ciudadanía y el Estado.
El abogado afirma que actualmente la corrupción privada ha logrado mover los cimientos de gobiernos completos, como evidencia el penoso caso de la constructora brasileña Odebrecht. “La empresa logró contaminar toda la región, desde presidentes hasta cuadros medios de los distintos gobiernos”.
A juicio del especialista, la corrupción en Odebrecht “no solo incluye a funcionarios del sector que estaba gobernando sino también con el que podía llegar a gobernar”.
Este caso, continúa Rebolledo, demuestra que “la justicia operando limpiamente en un marco de institucionalidad firme, llega hasta los corruptos más poderosos quienes valiéndose de la Justicia, que ellos mismos han violado consuetudinariamente, logran importantes beneficios procesales a cambio de hablar, de cooperar. Así no se salva nadie. Ese es el caso Odebrecht”, destaca.
Al referirse a la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA, señaló que se trata de una ley de Estados Unidos destinada a combatir el soborno de funcionarios extranjeros. No importa que no haya ciudadanos estadounidenses involucrados directamente en el delito, ya que desde 1977, la FCPA permite a EEUU convertirse en el agente anticorrupción mundial.