El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha mostrado totalmente dispuesto a afrontar esta legislatura una reforma parcial de la Constitución, siempre que se sepa lo que se quiere tocar y lo que no, cuál es el principio y el final del proceso de modificación. Además, ha puesto sus líneas rojas, entre las que está, en primer lugar, la unidad de España.
Rajoy ha acudido este martes, a mediodía, al Congreso de los Diputados para celebrar el Día de la Constitución, en su 38 aniversario. Antes de pasar a la recepción oficial, ofrecida por la presidenta de las Cortes, Ana Pastor, ha declarado ante los medios de comunicación cuál es la posición de salida del Gobierno.
El presidente del Gobierno ha subrayado que la Constitución de 1978 es el pacto más importante que se ha hecho en España entre españoles. «Aparcaron sus diferencias y acordaron las normas de convivencia», ha recordado. «Con la Constitución vivimos una de las etapas de mayor progreso de la historia como Nación».
Para Rajoy, es un ejemplo de lo que se puede hacer con diálogo y acuerdo, como se ha demostrado, según ha dicho, en este primer mes de Gobierno. Rajoy ha mostrado su satisfacción por este primer mes de Ejecutivo, en el que se ha conseguido un pacto para el techo de gasto y los objetivo de déficit,. Además ha destacado las primeras subcomisiones que se han creado sobre el pacto de la Educación, así como el sistema de pensiones y la violencia de género, que permiten avanzar hacia grandes acuerdos.
Respecto a una posible reforma de la Constitución, Rajoy ha subrayado que el PP está dispuesto a considerar cualquier reforma razonable, pero ha insistido en que es imprescindible saber qué se quiere reformar, «qué se va a tocar y qué no, y qué se va a preservar». Las líneas rojas a su juicio son claras: la unidad de España, la soberanía nacional, la igualdad de los españoles, sus derechos y libertades, la pertenencia a la UE y los pilares del Estados del Bienestar.
«Se puede hablar, pero debemos ser prudentes, saber lo que se quiere modificar y lo que no. Conviene saber el principio y el final. No es un asunto para ocurrencias ni para frivolizar», ha advertido.
Con información de: ABC