Wall Street terminó este viernes al alza una semana de idas y venidas pese a las últimas palabras de la presidenta de la Reserva Federal (Fed), Janet Yellen, y gracias a los resultados trimestrales positivos de los tres grandes bancos.
Yellen opinó que mantener una economía con alta inflación y un mercado de trabajo de baja oferta podría ser positivo para reforzar una recuperación que sigue siendo débil, pese a una política acomodaticia extrema e históricamente larga.
La jefa de la autoridad monetaria consideró que una alta inflación puede ayudar a apuntalar la recuperación económica en Estados Unidos al incidir en que los economistas y los políticos deben repensar sus planteamientos sobre cómo salir de una recesión.
Unas palabras de más sencilla digestión que las actas de la reunión de septiembre publicadas en esta semana y en las que se revelaba que se ha ampliado el número de voces disidentes que consideran que es necesaria una nueva subida del precio del dinero en otro cuarto de punto.
Cada vez más analistas consideran ahora que la primera subida de los tipos de interés desde finales de 2015 podría anunciarse en diciembre, dados los bajos datos de desempleo, una inflación más cercana al objetivo marcado y un crecimiento del PIB más sólido.
Por otro lado, el parqué neoyorquino dio la bienvenida a los buenos resultados presentados por JPMorgan Chase, Citigroup y Wells Fargo, que celebraron con ganancias.
Los inversores también celebraron que las ventas minoristas en Estados Unidos avanzaron en septiembre un 0,6 %, aunque el dato sobre la confianza de los consumidores en octubre quedó por debajo de lo que habían previsto los analistas.
Con información de EFE