La búsqueda de una tercera alternativa política en EEUU, que rompa con la tradición bipartidista, pareciera estar a la vuelta de la esquina.
Gustavo Márquez / El Político
El 5 de octubre de 2021 entró en la escena política de los Estados Unidos, un comité de acción política, llamado Forward Party, con el firme objetivo de conformar un nuevo partido político, orientado hacia el centro. Su principal motivación es hacerle frente a la polarización que ha caracterizado la historia política de EEUU. Al frente de este movimiento está el millonario empresario, Andrew Yang, quien promete marcar una diferencia, en un entorno político caracterizado por las pugnas permanentes, entre dos bandos que considera irreconciliables. Para Yang, "los electores están saturados de un sistema político disfuncional", por lo que apunta hacia una tercera vía o alternativa para EEUU.
Pero Andrew Yang no es un paracaidista en el territorio político. Participó en la primarias demócratas de 2020, donde no alcanzó a figurar. También resultó perdedor en sus aspiraciones a la Alcaldía de Nueva York, en 2021. Sin embargo, y gracias a sus innovadoras propuestas, logró hacerse de un nutrido grupo de seguidores. Por lo que en octubre de 2021, se separó de las filas del partido demócrata, para registrar su comité de acción política. Una vía inicial para comenzar la recaudación de fondos y conseguir alianzas, de cara a la fundación de un nuevo partido político de centro.
En efecto, en julio de este año se le suman a su proyecto político dos organizaciones: Renew America Movement y Serve America. Agrupaciones que reúnen, tanto a republicanos, demócratas, como independientes, interesados en renovar el andamiaje político de EEUU, desde la perspectiva del servicio. Adicionalmente, Andrew Yang tiene a la exgobernadora republicana de Nueva Jersey, Christine Todd Whitman, como una fuerte aliada. Mientras, los promotores de Forward Party, han indicado que: "los estadounidenses pueden solucionar cualquier problema. Están hartos de las plataformas rígidas, con una organización monolítica de arriba hacia abajo. Así como de los partidos políticos obsoletos, cada vez más radicalizados e incapaces de ofrecer soluciones".
En efecto el poder deja secuelas cerebrales en los que lo ejercen, especialmente si es tanto poder y si reciben mucha adulación como los susodichos funcionarios cyan. En este ensayo el pre candidato presidencial Andrew Yang lo explican muy bien.https://t.co/Ek7bo1A3ht
— Rodrigou ? (@RodrigoGu55) November 15, 2021
¿Por qué es importante?
Uno de los postulados de la alta gerencia, es la búsqueda de una tercera vía, a partir de la confrontación entre dos puntos de vista, de los cuales surge un tercer punto de vista, que no estaba antes. De allí la importancia del diálogo en la confrontación de ideas. Precisamente porque no se puede concebir el mundo que nos rodea solo desde dos posturas extremas.
Y en el caso de la política, la presencia de nuevas visiones, de alternativas ante la polarización, de nuevos actores que no representes los extremos de la balanza, nos permiten descubrir lo que surge entre un punto A y un punto B, que no se podía ver antes, es decir, lo que surge en en centro del escenario. Una manera de hacer gerencia política.
En este sentido, quienes apoya una tercera vía partidista en EEUU, han asumido una postura de exigir cambios en las reglas democráticas, por la vía de un sistema de elecciones primarias no partidistas, con un mecanismo de voto preferencial, como el estrenado en Alaska. También una nueva distribución de los distritos electorales. Pero diseñada desde una posición independiente, sin la manipulación propia de los demócratas y/o los republicanos. Todo apoyados por los sondeos de opinión, que llevan encuestadoras como Gallup, que —según sus cifras— dos terceras partes de los EEUU apoyan, desde el año pasado, una tercera vía electoral, ubicada en el centro.
Casi todos los 3ro han fallado, pero puede que esté no. Tanta polarización se termina siempre canalizando una tercera vía. El único problema es que Andrew Yang tiene una popularidad que está por el piso. https://t.co/oAGaZVfseb
— Juane Herrera (@JuaneH) July 28, 2022
Entendiendo el contexto actual
En el pasado, varios proyectos políticos alternativos han fracasado, han sucumbido ante las garras del bipartidismo, que les ha robado el oxígeno a cualquier intento de construir una tercera vía. Sin embargo, para el director político nacional del Forward Party, Joel Searby, ante la pregunta obligada de: ¿por qué tendría que salir bien esta vez?, responde: "porque los dos partidos tradicionales se han centrado más en ganarnos y en dividirnos, que en resolver problemas y unirnos".
Aquí se pone en evidencia, una vez más, el dicho "divide y vencerás". Y Searby agrega que: "este es un momento único en nuestra historia y los votantes están listos. Finalmente tenemos una masa crítica de verdadero talento, el dinero y la voluntad de trabajar duro por una tercera vía".
There was history made in Houston this weekend as @FWD_Texas @Fwd_Party launched with hundreds of fired up Americans ready for a new brand of politics. Let’s build the movement the country needs. ⬆️?? pic.twitter.com/EYIjwAB0XZ
— Andrew Yang?⬆️?? (@AndrewYang) September 27, 2022
Una alternativa política en construcción, que ya cuenta con unos 75.000 voluntarios por todo el país, quienes se abrazan con el eslogan: “Ni izquierda. Ni derecha. Adelante”. Además, ya han celebrado un primer encuentro nacional, en Houston. Pero también se dan los encuentros virtuales. Como el que comenta el joven Curtis Harrison, quien motorizó una reunión desde el salón de su casa, con la división de Colorado. Allí participaron unas 25 personas, quienes se conectaron desde diferentes localidades de un estado, que en las últimas elecciones presidenciales, se inclinó fuertemente hacia el lado demócrata, en su intensión de votos. Adicionalmente, Searby comentó que en las próximas legislativas tendían una participación mínima. Pues su objetivo es: "constituirse en 30 estados para finales de 2023, y en el resto un año después. Pero no están enfocados en llegar a las presidenciales de 2024. Preferimos trabajar a nivel local, y desde el centro".
Presidential candidate Andrew Yang breaks down responding to a question about gun violence.
I would rather have a president who cries about lives lost to gun violence than one who turns a tragedy into a “thumbs up” photo-op with an orphan.pic.twitter.com/738XKjH3rS
— Keith Boykin (@keithboykin) August 11, 2019
En resumen
El historiador y profesor de la Universidad de Georgetown, Michael Kazin, ha comentado que la propuesta de una tercera vía política: "ha sido recibida con escepticismo en Washington. La principal crítica que les hacen es que renunciar a los bandos y defender unos ideales irreprochables está muy bien. Pero hay que bajar a las propuestas concretas, y de momento no lo han hecho. Sabemos que no quieren polarización, que no les gustan los extremos. Pero su principal obstáculo es el mismo sistema".
En este sentido, el propio sistema se ha encargado, a lo largo de la historia política de EEUU, de mantener a flote los extremos del entramado político. Donde una tercera vía tradicionalmente ha sido neutralizada. Pues los intereses son muy superiores, a título personal, que en beneficio de los votantes propiamente dichos.
Pero la diatriba política agresiva, la polarización que toca extremos casi de odio, ya tiene cansado al electorado. Y el trabajo de construir una tercera vía, que no estaba antes, se viene estructurando una vez más, pero sin prisa y con pausa. Pues no hay urgencia por figurar, por ganar, por llegar, sino por mantenerse e ir ganado espacios, con un tercer discurso, hacia el centro, que cada día gana más adeptos.