Las minas antipersonas infectan la frontera vene colombiana y constituyen una grave amenaza para la seguridad, la salud y la vida de una población local y un obstáculo para el desarrollo social y económico.
El Político
Hoy, 4 de abril, se celebra el Día Internacional de información sobre el peligro de las minas y de asistencia para las actividades relativas a las minas, proclamado por la ONU en 2005.
El objetivo principal de este día es crear conciencia sobre el peligro y las terribles consecuencias de las minas antipersonas para la seguridad e integridad de los humanos. Así como también, ayudar a todas las personas que han sido afectadas por este mal.
Las minas antipersonas infectan la frontera
En Colombia el desminado es un obstáculo para reconstruir la paz. En 2019, se calcula que hubo al menos una víctima al día de minas antipersonas y artefactos explosivos. El mayor número de afectados se da en las zonas rurales.
En un mensaje al Comité Permanente de Desminado de la Convención, en 2013, Venezuela anunció que no poseía minas antipersonales sembradas en territorio nacional.
Se destruyeron 1.073 minas antipersonas que se encontraban en 13 campos minados en periferias de seis puestos navales, y que hizo uso exclusivo de sus propios recursos para llevar a cabo el desminado.
Además destruyó un total de 47.189 minas antipersonal que tenía almacenadas.
Una denuncia de Venezuela
Hace cuatro días, Venezuela denunció la colocación de minas antipersonas por parte de los disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Las Farc mantienen actualmente un enfrentamiento armado con los militares venezolanos en La Victoria, un poblado del fronterizo ubicado en el estado Apure.
Una campaña de la ONU
Durante más de 20 años la ONU se ha centrado en cubrir las necesidades de las personas afectadas, y conseguir que haya el menor impacto posible en las personas, ya sean civiles, trabajadores humanitarios o que trabajan por el mantenimiento de la paz.
Definición de las minas antipersonas
Las minas antipersonas o antipersonales son artefactos explosivos que se entierran en el suelo o se camuflan, y se activan cuando alguien los pisa o golpea.
Estas armas afectan sobre todo a la población civil y acarrean graves daños humanos y económicos no solo durante las guerras, sino también cuando éstas acaban.
Pese a estar prohibidas, siguen siendo una amenaza que afecta sobre todo a la población civil y a la infancia.
Convención sobre su prohibición
Su uso estuvo muy extendido por todos los ejércitos del mundo hasta los años 90 del siglo pasado. No fue hasta 1997 cuando tuvo lugar el esfuerzo más importante dentro de la lucha por su erradicación: la Convención sobre la Prohibición de Minas Antipersonal.
Por primera vez en la historia, los países se ponían de acuerdo en prohibir completamente un arma de uso generalizado.
Hasta el momento, 164 países se han sumado a este instrumento del derecho internacional humanitario, también llamado Tratado de Ottawa.
Millones de minas destruidas
31 países han limpiado sus territorios de minas y 80 han destruido más de 59 millones de minas antipersonas almacenadas. Sin embargo, aún queda mucho por hacer.
Terreno seguro, hogar seguro
La campaña "Terreno seguro, hogar seguro" muestra cómo reemplazando campos de minas por campos de juego se puede unir a las comunidades.
También demuestra cómo crear conciencia sobre las víctimas y los supervivientes de conflictos armados.La campaña "Terreno seguro, hogar seguro" de la ONU
promueve el vínculo entre la acción contra las minas antipersonas y el deporte.
Tipos de minas antipersonas
Los principales tipos de minas antipersonas son:
explosivas o de presión, que estallan al ser pisadas u oprimidas.
Minas de rebote: cuando se activan, saltan hasta un metro de su emplazamiento y proyectan fragmentos metálicos en un radio de 100 metros.
De fragmentación: cuando explotan, se dispara una lluvia de fragmentos metálicos con un radio de acción de 200 metros.
Los desastres que dejan las minas
Pese a los avances, todavía existen muchos lugares del mundo donde las personas pueden morir, quedar discapacitadas o heridas con tan solo dar un paso.
Según la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas Antipersona (ICBL), más de 6.000 personas fueron víctimas de minas antipersonas o restos de explosivos en 2018. Más de la mitad de ellas murieron.
Estas minas afectan sobre todo a las personas más vulnerables y menos culpables de los conflictos. Así, 7 de cada 10 víctimas son civiles y más de la mitad son menores de edad.
Especialmente preocupante es el número de niños
afectados por estas explosiones que, según los expertos, ha crecido un 12% en los últimos dos años.
Países que tienen minas antipersonas
Los restos de explosivos de la guerra siguen afectando a millones de personas en unos 50 países. Según el ICBL, Afganistán, Malí, Birmania, Nigeria, Siria y Ucrania encabezan la “lista negra” de países con más minas antipersonal.
También hay cifras preocupantes en Angola, Bosnia, Camboya, Chad, Croacia, Irak, Colombia, Tailandia, Turquía, Yemen, Azerbaiyán y Sáhara Occidental.
Los explosivos están en todas partes
El desminado y retiro de otros artefactos explosivos es una tarea titánica. En Irak, por ejemplo, el trabajo en las zonas que estuvieron en manos del ISIS es extremadamente peligroso.
En Mosul los explosivos están por todas partes. Bajo tierra, en edificios, entre los escombros, en los armarios, en las casas.
Solamente en 2018 se eliminaron en esta ciudad unos 17.000 explosivos activos y se desactivaron más de 700 cinturones suicidas.
El UNMAS
Es un organismo internacional creado en 1997 por la ONU y cuya función primordial es aunar esfuerzos para erradicar el uso de minas y explosivos terrestres en el planeta.
Gracias a su maravillosa labor se ha logrado que muchas personas sigan ilesas y alejadas de tan inminente peligro como es el caso de Colombia, Haití, Irak, y Afganistán.
Estas actividades se realizan para brindar cooperación y asistencia en aquellos países donde el uso de minas para la guerra es una realidad.
Perseverancia y asociación
El año pasado, la comunidad de las Naciones Unidas que se ocupa de las actividades relativas a las minas hizo frente a los desafíos que se plantearon durante la pandemia de Covid-19.
El sector ha continuado con su trabajo con resultados obtenidos, ha cumplido con sus obligaciones, realizado sus reconocimientos, actividades de remoción, capacitación y erradicación de la amenaza de las minas terrestres y las municiones explosivas.
El progreso del trabajo
El sistema de las Naciones Unidas avanzó en su labor para mitigar la amenaza de los artefactos explosivos improvisados y fortaleció y estableció nuevas asociaciones.
La pandemia del Covid-19 ha dificultado la persecución de los objetivos y esto requiere más perseverancia a la hora de trabajar para lograr un mundo sin minas terrestres.
Paz y seguridad
Además, 12 departamentos y oficinas de la Secretaría de la ONU participan en los programas de desminados que se llevan a cabo en 30 países y 3 territorios.
El desminado permite que los cascos azules patrullen, las organizaciones humanitarias distribuyan ayuda y las personas lleven una vida sin temor a que un mal paso les suponga la muerte.
Para un mundo mejor
Para que la humanidad pueda disfrutar de un planeta sostenible, es necesario que todos los países que usan las minas como explosivos de guerra se liberen de ellas de una vez por todas.
Toda la sociedad tiene el derecho de disfrutar de plena seguridad, pero pese de los esfuerzos de la ONU, las minas siguen representando un grave peligro para muchos habitantes del mundo.
Fuente: ONU un.org