El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, agradeció públicamente al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por la aprobación y aceleración de un paquete de asistencia militar valorado en 4.000 millones de dólares. Este envío incluye municiones y armamento avanzado, con el objetivo de reforzar la seguridad israelí en medio de tensiones regionales y conflictos en Gaza e Irán.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, utilizó poderes de emergencia para agilizar esta entrega, destacando que refleja el compromiso inquebrantable de la administración Trump con la seguridad de Israel. Desde que Trump asumió el cargo, su gobierno ha autorizado ventas militares a Israel por un total cercano a 12.000 millones de dólares.
Netanyahu calificó a Trump como "el mejor amigo de Israel" y expresó que este apoyo es crucial para "terminar el trabajo contra el eje terrorista iraní". Además, esta decisión coincide con la reanudación de bombardeos israelíes sobre Gaza tras el estancamiento en las negociaciones para un alto el fuego.