Un organismo cívico de Nicaragua, crítico con el Ejecutivo, y opositores, se manifestaron contra las elecciones generales de noviembre próximo, en las que el presidente Daniel Ortega busca una nueva reelección, en medio de forcejeos con simpatizantes sandinistas.
La manifestación, convocada por el Movimiento por Nicaragua y que partió de la rotonda San Jerónimo, municipio de Masaya, 28 kilómetros al sureste de Managua, se realizó a pesar del acoso de simpatizantes del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) que instalaron vallas por la ruta de la caminata opositora, según denunciaron.
En una de las calles estaban concentrados jóvenes vestidos con camisetas blancas con leyendas alusivas al 37 aniversario de la revolución sandinista, con banderas del FSLN y coreando "Viva Daniel", que intentaron impedir la marcha opositora, según constató Efe.
Al pasar por el lugar ambos grupos antagónicos se enfrentaron verbalmente, con garrotes y las mismas banderas, sin lesionados de consideración.
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En la marcha convocada por el organismo cívico participaron miembros de la Coalición Nacional por la Democracia, que afectada por una serie de fallos judiciales decidió no participar en las próximas elecciones, que consideran una "farsa".
Durante el acto, el Movimiento por Nicaragua, que denominó la manifestación como "Jornada Cívica Azul y Blanco", en honor a la bandera del país, leyó un pronunciamiento contra los comicios de noviembre.
En el documento, leído por el director ejecutivo de ese organismo, Sergio Bofelli, ese organismo expresó su rechazo al proceso electoral, porque, a su juicio, se "convertido en una grotesca burla para la mayoría de la población, al no cumplir con las garantías legales y de decencia imprescindible".
También se pronunciaron en contra de "la pretensión de instaurar en nuestro país una dictadura dinástica", en alusión a la candidatura de Ortega y de su esposa, Rosario Murillo, como aspirante a la Vicepresidencia por los sandinistas.
Según el principal bloque opositor, los comicios de noviembre serán una "farsa" en la que Ortega se validará gracias a la complicidad del resto de partidos minoritarios que sí competirán con el sandinismo, favorito según los sondeos.
El 6 de noviembre próximo los nicaragüenses elegirán a un nuevo presidente, vicepresidente, 90 diputados ante la Asamblea Nacional y 20 representantes ante el Parlamento Centroamericano.
Con información de EFE