Un niño de 15 años residente en Florida, al que las autoridades aún no han identificado, murió luego de producirse un tiroteo en la casa de un oficial de policía de Tampa.
El Político
Las investigaciones tampoco han esclarecido, de momento, la procedencia del arma, así como otros detalles, aunque se precisó que cuatro adolescentes estaban en la referida vivienda cuando ocurrieron los incidentes el pasado viernes.
Uno de ellos fue quien llamó al 911 para denunciar el tiroteo, pero el adolescente murió en el hospital adonde fue trasladado con una herida de bala.
Funcionarios de la oficina del sheriff del condado de Hillsborough investigan cómo los jóvenes obtuvieron el arma y qué sucedió exactamente. Asimismo, declararon que nadie enfrenta cargos en este momento.
El propietario de la vivienda estaba de servicio policial cuando ocurrió el tiroteo y se conoce que la víctima no estaba relacionada con el oficial.
Durante los últimos meses, se han registrado en Florida varios incidentes que implican a adolescentes y armas de fuego. Ana Lauren Álvarez Hernández, una cubana de 16 años, murió en julio pasado por una bala perdida en horas de la noche, mientras se encontraba en el estacionamiento de un restaurante de Miami.
Más recientemente, a finales de noviembre, dos niños de 14 y 15 años cada uno, fallecieron porque un amigo disparó un arma contra ellos, al parecer, por accidente.
En octubre, dos jóvenes se enfrentaron a balazos con integrantes de una pandilla rival, desde el interior de un vehículo en marcha. El altercado provocó una herida en una pierna de Ángel Cueli, de 15 años, estudiante del Coral Park Senior High School.
Cueli fue reportado muerto a poco de haber llegado a la institución médica adonde fue trasladado y no tenía, en absoluto, relación con el enfrentamiento que puso fin a su vida.
Fuente: Cibercuba