El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución promovida por Estados Unidos que refuerza la misión de pacificación en Sudán del Sur (UNMISS), incluido el despliegue de nuevos soldados hasta llegar a los 17.000.
El texto da potestad a las tropas a utilizar "todos los medios necesarios" para proteger al personal de la ONU y sus instalaciones, así como ha tomar acciones "proactivas" para proteger a los civiles.
Todo ello a pesar de la negativa de la oposición gubernamental a la presencia de cascos azules, lo que podría ocasionar enfrentamientos con las fuerzas armadas del país.
Entre los 17.000 militares con los que contará la UNMISS, habrá 4.000 nuevos soldados africanos.
Las fuerzas de la misión recibieron criticas la pasada semana al no conseguir proteger de ataques a la población civil, así como por no haber intervenido ante casos de posibles violaciones fuera de los campamentos de la ONU.
La resolución fue aprobada en el Consejo de Seguridad con 11 votos a favor y las abstenciones de Rusia, China, Venezuela y Egipto, que querían contar con el consentimiento del gobierno de Sudán del Sur para proteger y patrullar por la capital, Juba.
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La resolución no incluye la imposición de embargo de armas al país, un punto en el que habían insistido Reino Unido y España, entre otros.
El texto demanda a los líderes del país africano de nuevo que cesen en el conflicto e implementen el acuerdo de paz pendiente.
Por su parte, el embajador de Sudán del Sur ante la ONU, Akuei Bona Malwal, mostró su rechazo a una resolución que dijo "va contra el principio básico de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU que es el consentimiento de las partes en conflicto".
En las últimas semanas, Naciones Unidas ha advertido repetidamente de la peligrosa situación que vive Sudán del Sur con la actual oleada de violencia que se inició a principios de julio.
Combates entre unidades militares rivales registrados en la capital, Yuba, entre el 8 y el 11 de julio dejaron al menos 300 muertos y provocaron el desplazamiento de miles de personas.
Los choques enfrentaron a fuerzas leales al presidente sursudanés, Salva Kiir, y fieles al líder opositor, Riek Machar, que actualmente se encuentra en paradero desconocido y que ha sido sustituido como vicepresidente del Gobierno de unidad creado para tratar de dejar atrás el conflicto.
Con información de EFE