La oposición de Israel afina los detalles de un pacto de gobierno dirigido por el líder ultra nacionalista Naftali Bennett, quien ocuparía el puesto de primer ministro en la primera mitad de la legislatura y apartaría del poder al primer ministro Benjamín Netanyahu.
El Político
Conforme a la versión periodística del diario digital madrileño El País, los líderes de siete partidos de la oposición israelí se reunieron en la noche del martes en Tel Aviv. Asegura que durante el encuentro trabajaron en ultimar un acuerdo de coalición destinado a despojarle el poder al primer ministro aún en funciones Netanyahu. Sin embargo el líder centrista Yair Lapid fue quien recibió el encargo oficial de formar un nuevo ejecutivo. Mientras tanto, la oposición parece estar conteste en que sea Bennett quien ocupe en lo inmediato el puesto de primer ministro.
Lapid, quien lidera el segundo partido político con las mayores inclinaciones electorales para la Kneset (Parlamento) en las urnas el pasado marzo, tiene previsto ejercer como ministro de Exteriores. Luego rotaría su puesto con Bennett a mediados de 2023. Si es que el acuerdo de coalición se cierra definitivamente antes de la medianoche de este miércoles. Será entonces cuando se agote el plazo concedido al líder centrista el pasado 4 de mayo por el presidente del Estado de Israel, Reuven Rivlin.
El reparto final de carteras y altos cargos se presentaba como el último gran obstáculo para la finalización del acuerdo político. Pero después de las negociaciones entre los equipos de los partidos, la reunión de sus líderes intentaba solventar los obstáculos en “un esfuerzo final”. Así se hizo saber mediante un comunicado público citado por la agencia noticiosa France Press.
— Naftali Bennett בנט (@naftalibennett) May 30, 2021
Netanyahu sin apoyo presidencial ni legislativo
El partido Likud que dirige Netanyahu intentó durante la jornada una nueva maniobra dilatoria para impedir la formación de un gabinete alternativo. Sus responsables reclamaron al presidente Rivlin que vetara la eventual designación de Bennett como jefe del Ejecutivo. En razón de que no había recibido el encargo formal para ello. Los servicios jurídicos de la presidencia respondieron poco después que las leyes básicas que hacen la función de texto constitucional en Israel avalaban su designación. Y que la misma era sostenida por un pacto con mayoría suficiente en la Kneset.
La versión de El País de España estima que las negociaciones de paz con los palestinos o el papel de la religión en el Estado son cuestiones que quedarán previsiblemente excluidas del programa del futuro gobierno. Y que el mismo enfocará su atención principalmente en el consenso sobre la recuperación de la economía tras la pandemia y la modernización del sistema sanitario.
Bennett y Lapid cuentan con el respaldo de 57 diputados de tres partidos conservadores, dos de centro y dos de izquierdas. Por este motivo están obligados a recabar el voto de al menos cuatro parlamentarios de la minoría árabe para garantizarse la mayoría en la investidura. El partido Raam cuenta precisamente con esos cuatro escaños. Y se ha mostrado favorable a sumarlos a los del resto de la oposición. Pero a cambio de puestos menores en el gabinete y el control de una comisión financiera clave en la Kneset.
Mientras tanto este miércoles el parlamento israelí eligió por amplia mayoría al laborista Isaac Herzog como futuro presidente del país. Un cargo ceremonial más que ejecutivo, pues las tareas de gobierno recaen sobre el primer ministro y su gabinete. La elección llega el 2 de junio, el mismo día en que se termina el plazo del candidato Yair Lapid para comunicar un acuerdo gubernamental alternativo a Netanyahu.
יש לנו מנצח: pic.twitter.com/oaLOTnD7ct
— ינון מגל (@YinonMagal) June 2, 2021
Fuente: El País / France Presss