Los republicanos dijeron oficialmente que el intento de Donald Trump de anular su derrota electoral de 2020 y el ataque mortal al Capitolio de los EE. UU. era una "expresión política legítimo".
El Político
La medida del Comité Nacional Republicano (RNC) se produjo en sus reuniones de invierno en Salt Lake City el viernes, como parte de la censura formal de Liz Cheney de Wyoming y Adam Kinzinger de Illinois, los únicos republicanos en el panel del 6 de enero.
Una resolución aprobada por unanimidad dijo que Cheney y Kinzinger estaban involucrados en la “persecución de ciudadanos comunes involucrados en un discurso político legítimo”.
"El Comité Nacional Republicano por la presente censura formalmente a los Representantes Liz Cheney de Wyoming y Adam Kinzinger de Illinois y cesarán inmediatamente todos y cada uno de los apoyos como miembros del Partido Republicano por su comportamiento que ha sido destructivo para la institución de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, el Partido Republicano y nuestro república, y es incompatible con la posición de la Conferencia", indica el texto.
Lo que sucedió
El 6 de enero de 2021, dos semanas antes de la toma de posesión de Joe Biden, el Capitolio de EE. UU. en Washington fue atacado por partidarios de Trump a quienes el expresidente les había dicho que “lucharan como el demonio”.
La bandera de batalla confederada se llevó a los pasillos del Congreso. Los alborotadores untaron heces en las paredes.
La propiedad fue robada, las ventanas rotas. Los miembros del Congreso fueron llevados a un lugar seguro.
Algunos alborotadores buscaron legisladores para capturarlos y posiblemente matarlos. Otros corearon por el ahorcamiento de Mike Pence, el vicepresidente de Trump que resistió la presión de negarse a certificar los resultados del colegio electoral.
Siete personas murieron. Más de 100 policías resultaron heridos y más de 700 personas han sido acusadas. Once miembros de una milicia de extrema derecha enfrentan cargos de conspiración sediciosa .
Steve Bannon, un asesor cercano de Trump, se declaró inocente de desacato criminal al Congreso. Mark Meadows, el jefe de gabinete de la Casa Blanca de Trump, podría enfrentar la misma sanción .
Trump fue acusado por incitar a la insurrección, pero los senadores republicanos lo absolvieron. En repetidas ocasiones ha prometido indultos para los alborotadores del 6 de enero si vuelve a ser presidente. Ha declarado abiertamente que su objetivo era “anular” las elecciones.
Siguen llegando revelaciones sobre su participación en eventos antes y el 6 de enero.
Fuente: Univisión