Cerca de la medianoche de este jueves, Nayib Bukele, actual presidente de El Salvador, dio un paso más hacia su eventual reelección.
El Político
Bukele se presentó en la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE), acompañado por su vicepresidente y posible compañero de fórmula, Félix Ulloa.
Ambos presentaron, a los magistrados de TSE, sus respectivas solicitudes de inscripción como aspirantes a los comicios de 2024.
Culminada la diligencia, el gobernante salió del edificio y saludó a la multitud de seguidores que se agolpó en las adyacencias del Tribunal.
“El pueblo salvadoreño va a decidir si quiere seguir construyendo el nuevo El Salvador o si quieren regresar al pasado”, dijo el jefe de Estado.
Nayib Bukele agregó que, pese a lo alcanzado en su actual gestión, aún “falta mucho”.
“Eso lo vamos hacer en los próximos cinco años”, sentenció el presidente, cuya posible reelección es tachada de inconstitucional.
Las leyes salvadoreñas impiden que un mandatario en funciones compita para un segundo periodo consecutivo.
Esas mismas normas incluyen, sin embargo, una excepción que podría jugar al favor de Bukele.
Si el jefe de Estado renuncia el 01 de diciembre, seis meses antes de la conclusión de su mandato, el Ejecutivo quedaría en manos del vicepresidente y él quedaría habilitado para postularse.
Desde la oposición han advertido que la Constitución del país es clara a la hora de definir las causales que justifican una dimisión.
A la luz del artículo 156 de la Carta Magna salvadoreña, Nayib Bukele sólo podría dejar el cargo “por causa grave debidamente probada”.
De acuerdo con algunos expertos, Bukele está en la obligación de justificar, con argumentos de peso, su eventual decisión de abandonar la Presidencia, de lo contrario la renuncia no podría ser aceptada por la Asamblea Legislativa.