El presidente de Colombia, Gustavo Petro y una fuente de la oposición venezolana, informaron este miércoles que el régimen de Nicolás Maduro y la oposición reanudarán el viernes en México las negociaciones sobre la crisis de Venezuela.
El Político
A través de su cuenta de Twitter, Petro indicó que "este 25 y 26 de noviembre se reinician los diálogos entre el régimen de Maduro y la oposición venezolana".
El mandatario manifestó su disposición a apoyar los contactos entre ambas partes. Pero no precisó dónde serían estas conversaciones.
Este 25 y 26 de Noviembre se reinician los dialogos entre el gobierno de Maduro y la oposición venezolana.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) November 23, 2022
¿Por qué es importante?
Se trata de un nuevo acercamiento entre las partes tras la suspensión de las negociaciones hace más de un año.
La oposición pidió un cronograma rumbo a elecciones presidenciales "libres" previstas para 2024 después de haber acusado a Maduro de reelegirse fraudulentamente en 2018.
Maduro, a su vez, tiene como demanda central el fin de las sanciones que EEUU le impuso a Venezuela, reportó France24.
De acuerdo con información que una fuente dio a El Tiempo, en la agenda de diálogos se buscará poder llamar a elecciones en 2024 y desbloquear 2.700 millones de dólares de los fondos gubernamentales que han sido objeto de sanciones internacionales.
El sábado está previsto firmar un primer acuerdo sobre aspectos sociales, agregó la fuente, pero todavía no hay consenso alrededor de asuntos políticos cruciales como las próximas elecciones presidenciales y sus condiciones.
Los negociadores principales de Maduro y la oposición, Jorge Rodríguez y Gerardo Blyde, respectivamente, se encontraron el 11 de noviembre en el marco del Foro de París, por intermediación del presidente de Francia, Emmanuel Macron, aunque en ese momento no acordaron fecha para retomar las conversaciones.
En contexto
Las conversaciones –que comenzaron formalmente en septiembre del 2021 en México tras la firma de un memorando de entendimiento un mes antes– se mantienen suspendidas desde octubre del año pasado.
Entonces, Maduro ordenó a su delegación retirarse de los diálogos en protesta por la extradición a EEUU de su presunto testaferro, el empresario colombiano Álex Saab, quien estuvo detenido en Cabo Verde.
La reanudación de las negociaciones tomó fuerza en los últimos meses, empujada por actores internacionales que instaron a las partes a volver encontrarse en México.
Expresaron su objetivo de "animar a los actores políticos venezolanos a acordar una salida a la crisis, con miras a unas elecciones presidenciales libres, democráticas y con observación electoral internacional en 2024″.
Ni Rodríguez ni Blyde se han pronunciado sobre la reanudación de contactos prevista para este fin de semana.
Desde que asumió el poder el 7 de agosto, Petro estrecha lazos con Maduro. Ambos retomaron las relaciones diplomáticas Caracas-Bogotá, rotas desde 2019 por las diferencias entre el entonces presidente, Iván Duque (2018-2022), y el mandatario venezolano.
Maduro, en tanto, ha buscado contactos directos con la administración de Joe Biden, que envió delegados a Caracas en mayo y junio.
El régimen de Maduro ha dicho repetidamente que el camino para Venezuela es diálogo, la suspensión de todas las sanciones que pesan sobre su gobierno y el respeto a la Constitución del país sudamericano.
En conclusión
Washington, oficialmente, sigue desconociendo a Maduro y considera a Guaidó líder "legítimo" de Venezuela, pero ha expresado disposición a revisar sus sanciones, que incluyen un embargo petrolero en medio de la crisis energética por la invasión rusa a Ucrania.
Europa también busca salidas y Maduro se ha declarado "listo" para proveerle petróleo y gas.
Paradójicamente, el régimen de Maduro ha dicho repetidamente que el camino para Venezuela es diálogo.
Sin embargo, nunca ha mostrado una disposición real de honrar los acuerdos y de allanar el camino para unas elecciones libres, confiables y con garantías en Venezuela.
Por otra parte, Juan Guaidó y los principales partidos opositores se debilitaron: perdieron las elecciones regionales del año pasado, en las que regresaron a las urnas tras boicotear por denuncias de fraude las presidenciales de 2018 y las legislativas de 2020, y su poder de convocatoria a protestas se desplomó.
Analistas como el consultor político Pablo Andrés Quintero consideran que la situación ha quitado "incentivos" para que el régimen de Maduro ceda en las negociaciones.
La oposición, intentando relanzarse, impulsa unas primarias hacia las presidenciales.