La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) pidió a la Unión Europea (UE) que sus ayudas económicas para el proceso de paz en Colombia lleguen a las víctimas del conflicto y no queden únicamente en manos de las empresas europeas con intereses en el país sudamericano.
"Todo se hace en nombre de la paz y nosotros no queremos que esas ayudas terminen en manos de empresas europeas agroindustriales o de explotación de petróleo y minerales, sino que deseamos que el dinero llegue a las víctimas", explicó el abogado y representante de la FIDH ante la Organización de Estados Americanos, Luis Guillermo Pérez Casas, durante un encuentro con medios en Bruselas.
El letrado del Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo, que ha seguido de cerca las negociaciones de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC en La Habana, añadió que las partidas económicas deben permitir a los afectados por la violencia "encontrar la posibilidad de sobrevivir sosteniblemente a muy largo plazo".
En ese sentido, Pérez Casas apostó por la creación de una conferencia internacional de cooperación para la paz de Colombia que diseñe una estrategia y coordine las ayudas y préstamos.
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Según el abogado, la Unión Europea debería promover la puesta en marcha de dicho organismo. Sobre los 400 millones de euros anunciados por el Banco Europeo de Inversiones (BEU), el abogado afirmó que si finalmente se destinan a compañías europeas, no deberían considerarse una contribución al proceso de paz, sino "un aporte a los intereses de las empresas europeas en Colombia".
"Si lo presentan como un aporte al proceso de paz, debe haber una carta ética de esas inversiones destinadas a la cooperación", comentó el representante de la FIDH.
De todas formas, Pérez Casas reconoció que desde los años del expresidente Álvaro Uribe en el gobierno hasta la actualidad, la "sensibilidad" de los Veintiocho hacia el conflicto ha aumentado entre muchos funcionarios comunitarios.
Con respecto al próximo referendo del 2 de octubre, en el que la población colombiana debe pronunciarse sobre los acuerdos, el abogado se mostró convencido de que ganará el "sí" a la paz y de que el proyecto de Uribe quedará "tremendamente debilitado", pese a añadir que si triunfa el "no" toda la negociación habrá sido en vano.
"Si se pierde, se posicionaría el discurso de la extrema derecha que haría inviable cualquier negociación", afirmó Pérez Casas sobre una posibilidad que, según sus propias palabras, obligaría a las FARC a retomar las armas, incluso en contra de su voluntad.
Sobre los paramilitares, presentes en una tercera parte de los municipios del país, el letrado consideró que deben ser desmantelados, mientras que en el caso del Ejército de Liberación Nacional (ELN), manifestó sus esperanzas de alcanzar una solución política en los próximos años.
"Si se mantienen los paramilitares y el ELN y empiezan a asesinar a militantes de las FARC que hayan hecho dejación de las armas, muy probablemente muchos de esos muchachos de las FARC terminen en las filas del ELN", comentó Pérez Casas.
En cuanto a la campaña del referéndum, el abogado subrayó la importancia de la pedagogía sobre los acuerdos para explicar que no se trata de una votación a favor o en contra del presidente Santos y se felicitó por que en las grandes ciudades haya desaparecido la "indiferencia" frente al conflicto armado.
Con respecto a la memoria sobre la guerra, afirmó que las víctimas seguirán movilizándose para "saber la verdad" y contrastó la situación con España y su "gran déficit frente a sus propias víctimas".
Con información de EFE