El plan de la administración Biden de retirar a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de la lista de organizaciones terroristas extranjeras apenas causó una onda fuera de Washington cuando se conoció la noticia.
El Político
Pero en Florida, donde se estima que hay unos 150.000 votantes colombianos estadounidenses, la historia es diferente.
La política de Biden está resonando con fuerza entre los demócratas, lo que ha llevado a algunos de los principales funcionarios electos, estrategas y activistas del estado a arremeter contra la decisión, reportó Politico.
Críticas a la decisión de Biden
"Esto es terrible. Es una mala política. Es una mala política", dijo la senadora estatal de Florida Annette Taddeo, una candidata demócrata a la gobernación que es colombiana-americana.
Calificando la noticia de "indignante", Taddeo criticó al gobierno de Biden en Twitter y relató cómo huyó de su país natal a los 17 años "a causa de la organización terrorista marxista, las FARC, un grupo de milicianos que secuestró a mi padre, que era un piloto de combate estadounidense de la Segunda Guerra Mundial".
Historias como la de Taddeo no son raras en Miami-Dade, el condado más poblado del estado. Es el hogar de una enorme concentración de votantes hispanos y de exiliados latinoamericanos que huyeron de la violencia izquierdista o de las dictaduras en Colombia, Cuba, Nicaragua y Venezuela y encontraron un vínculo político común en Florida.
When I was 17 years old I was forced to flee Colombia, the only country I ever knew because of the Marxist terrorist organization, FARC, a group of militias who kidnapped my father who was a WWII American fighter pilot.
— Annette Taddeo (She/Her/Ella) (@Annette_Taddeo) November 23, 2021
Piden reconsideración a Biden
La alcaldesa del condado de Miami-Dade, la demócrata Daniella Levine Cava, pidió a la administración que reconsidere su decisión y "redoble sus esfuerzos para rechazar la agenda comunista extremista que destruyó naciones como Venezuela".
Reconociendo la sensibilidad del asunto, la Casa Blanca se apresuró a celebrar una conferencia telefónica el miércoles para explicar la decisión, que no debía hacerse pública durante días, pero que salió a la luz el martes por la tarde cuando The Wall Street Journal informó de la inminente medida.
El Departamento de Estado había notificado al Congreso sus próximos planes, dijo un alto funcionario de la administración; pero el gobierno colombiano ni siquiera había sido notificado cuando se conoció la noticia.
Mirado con lupa
La decisión del Departamento de Estado de retirar a las FARC de su lista de grupos terroristas no supone un pase libre; para el antiguo grupo guerrillero, según el alto funcionario de la administración, que se negó a hablar en privado.
El plan de retirar a las FARC de la lista, dijo el funcionario, se produce después de una revisión anual que incluyó las aportaciones; de la comunidad de inteligencia, las fuerzas de seguridad, la embajada de Estados Unidos y el Departamento de Estado.
Cinco años después de iniciado el proceso de paz, el 90 por ciento de los rebeldes de las FARC; se han desmovilizado y han cumplido sus compromisos en virtud del acuerdo, señaló el funcionario.
