Antes de notificarse sobre los primeros contagios en Europa, los datos que circulaban en Twitter ya predecían el inicio del COVID-19. ¿Podría funcionar como herramienta para prevenir pandemias en el futuro?
El Político
“Las redes sociales han abierto nuevos caminos para la llamada ´infodemiología´, que hace referencia al estudio de la información y los datos online para extraer información sobre salud. Las aplicaciones de infodemiología analizan las consultas que hacen los usuarios en motores de búsqueda, con el objetivo de predecir brotes de enfermedades (por ejemplo, la gripe). También monitorizan las actualizaciones del estado de las personas en redes como Twitter y hacen un seguimiento de la efectividad de las campañas de marketing de salud". Quiere decir que en el futuro las pandemias podrán predecirse con el uso de las redes sociales.
Así lo aseguran la profesora Mónica Valderrama Santomé y la investigadora Julia Fontenla Pedreira de la Universidad de Vigo, España, ambas especializadas en las áreas de Comunicación Audiovisual y Publicidad. El artículo lo publica sitio digital The Conversation, una red de medios de comunicación sin fines de lucro. Allí publican noticias y artículos elaborados por académicos e investigadores, bajo una licencia Creative Commons gratuita.
Antes de que se hicieran públicos los primeros casos de covid-19 en Europa, los datos que circulaban en #Twitter ya predecían el inicio de la pandemia. ¿Podría funcionar como herramienta preventiva?
Por @monivalderrama y Julia Fontenla (@UCC_UVigo).https://t.co/46qVJoFOEl
— The Conversation ES (@Conversation_E) March 18, 2021
Twitter, pionero en detectar la pandemia de covid
Conforme a las autoras, diferentes estudios resaltan que el conocimiento de esta información permite establecer patrones para mejorar la sanidad. Además puede prevenir pandemias o relacionar nuevos síntomas con la aparición y transmisión de enfermedades infecciosas. Reconocerlos a través de palabras clave en las publicaciones de los usuarios y conocer su ubicación a través de la geolocalización implican un gran avance para saber hacia dónde se propagan las enfermedades.
En este sentido, antes de la irrupción de la pandemia de coronavirus irrumpiera en nuestras vidas, algunas investigaciones, como la de la Universidad de Corea, detectaron un inquietante número de búsquedas a través de Google estrechamente asociadas con la gripe. Así, iniciaron un proceso de vigilancia de los brotes empleando Twitter.
El algoritmo utilizado reflejó que esta red puede monitorear la actividad de la enfermedad más rápido que con los informes de médicos y otros profesionales de la salud.
Twitter lo gorjeó antes
Los resultados demostraron que el control de los contenidos de Twitter se puede utilizar para rastrear y estimar, en tiempo real, las preocupaciones de los usuarios relacionadas con la gripe. Además, permitía mejorar la precisión de los modelos de detección y proporcionar alertas tempranas en sus primeras manifestaciones.
En la misma línea, investigaciones recientes de la Scuola IMT Alti Studi de Lucca han evidenciado que Twitter predijo el inicio de la pandemia del COVID-19 incluso antes de que se hiciesen públicos los primeros casos en Europa.
Basándose en las publicaciones de esta red social, se descubrieron patrones que describían cómo se expandió la pandemia a través de la geografía mundial. Para ello, se detectaron palabras relacionadas con los indicios de la enfermedad (neumonía, tos seca) en los idiomas más hablados de la Unión Europea. También se estableció una base de datos que correlacionaba todas las manifestaciones. Y que evidenciaba un gran interés público antes de la declaración de la alarma mundial.
Como consecuencia de la propagación del coronavirus, desarrollaron programas de rastreo de conversaciones a través de la API (Application Programming Interfaces) de Twitter.
El objetivo era analizar grupos y sentimientos sociales según su ubicación y tiempo de publicación. Entre los datos, se incluye el seguimiento de hashtags emergentes (como #Socialdistancing o #workfromhome).
Algunos de estos programas también desarrollan pruebas de autenticidad de la información, a través de iniciativas basadas en la Distributed Ledger Technologies (DKTs). Estas garantizan la procedencia, autenticidad y trazabilidad de los datos para combatir el engaño digital.
Estos largos meses de pandemia nos han confirmado, entre otras muchas cosas, la importancia de disponer de sistemas digitales de registro de la historia clínica personal de cada ciudadano.https://t.co/pzJGAooEmp
— The Conversation ES (@Conversation_E) March 19, 2021
¿Prevenir las pandemias con redes sociales?
El big data ha dado paso a un volumen de información impensable hace una década. Con una gran acumulación de datos personales extraídos de redes sociales. Estos pueden resultar preocupantes pero, a la vez, podrían ser una mina de oro para resolver crisis sanitarias. El poder predictivo de las redes trae consigo cambios en la construcción de tácticas más provechosas ante un futuro hipotético.
Hasta ahora, las tendencias de Twitter se habían usado con fines comerciales para determinar rápidamente los agentes externos que podían perjudicar el mercado. También se evaluaban las respuestas de los consumidores en tiempo real ante campañas publicitarias.
Pero ahora estas herramientas también pueden ser vitales en situaciones de riesgo. Lo que abre una puerta hacia la transformación del tiempo de respuesta en circunstancias de alarma. Incluso sobre la presencia de futuras pandemias minimiza los riesgos de un posible resurgimiento del contagio.
Al lado de ello, nacen aplicaciones basadas en sensores sociales. Estas permiten establecer medidas de control epidemiológico más adecuadas, según la zona geográfica de la afección latente o destinadas a rastrear los contactos. Aplicaciones móviles como Radar COVID, COVIDSensing o COVID tracker, entre muchas otras, amplían las posibilidades de cerrar el paso a futuras pandemias que se extienden ya en redes sociales.
Fuente: The Comunication