El terremoto registrado en Turquía no es solo el más violento en varias décadas, sino también uno de los más extensos en cuanto a la zona geográfica afectada.
El Político
El terremoto de magnitud 7,8 que sacudió esta madrugada el sureste de Turquía y a los países vecinos, se cobró la vida de al menos 284 personas y dejó a 2.232 heridos, informaron inicialmente las autoridades turcas.
Las autoridades temen que este terremoto pueda superar las consecuencias devastadoras del seísmo que se produjo en este mismo país en 1999, y que dejó 17.000 fallecidos y más de un millón de damnificados.
¿Por qué se produjo el terremoto?
Turquía se encuentra en una zona especialmente conflictiva desde el punto de vista geológico, ya que en este país confluyen tres placas tectónicas: la de Anatolia, la de Arabia y la de África.
Los expertos creen que este último temblor se ha producido en el este de la placa de Anatolia, en una falla muy activa donde en las últimas décadas se han producido varios terremotos con magnitud superior a 6.
La falla se sitúa en una zona próxima a la frontera entre Turquía y Siria, extendiéndose a lo largo de una inmensa fractura del terreno en la que chocan bloques de rocas impulsados por el desplazamiento de las placas tectónicas.
Los temblores se producen cuando hay un movimiento brusco de estos bloques, por lo que se concentran en los bordes de las placas, que colisionan unas contra otras.
Según National Geographic, el primer seísmo tuvo su epicentro en la zona donde la placa tectónica de Anatolia hace contacto con la placa arábiga, a una profundidad de 7 kilómetros, una región considerada como una de las zonas sísmicas más activas del mundo.
Por ello, el seísmo solo es uno de tantos que han tenido lugar recientemente. Por ejemplo, el año 1999 ya tuvo lugar aquí otro seísmo de 7,4 grados en la escala de Richter que causó 17.000 víctimas. En 2011, otros dos acabaron con la vida de más de 700 personas. En 2020, otro terremoto causó 26 muertos y 800 heridos.
Entre líneas
Los dos terremotos que causaron la mayor cantidad de víctimas ocurrieron en Irán hace 1.162 y 1.125 años. Según fuentes orales y escritas, 350.000 personas perdieron la vida en los terremotos, en uno 856 y en el otro, 893 personas.
En conclusión
Turquía ha ido implementando medidas para mejorar su preparación y respuesta ante terremotos en los últimos años, incluyendo la construcción de edificios resistentes. Sin embargo, no todo el parque inmobiliario ha sido actualizado y la falta de inspecciones permite que algunos constructores ignoren las normativas.
“El terremoto tuvo una magnitud de 7,8 y su hipocentro se ha situado a unos 18 kilómetros de profundidad, que es relativamente poco para un seísmo de tal magnitud".
Así lo explicó Galderic Lastras, profesor titular del departamento de Dinámica de la Tierra y del Océano de la Universidad de Barcelona, en declaraciones a Science Media Center (SMC) quien explica que, a menor es la profundidad, mayores son las intensidades con las que se percibe en superficie y, por tanto, sus efectos sobre la población.
Por su parte, investigadores del Centro de Investigación de Geociencias de Alemania (GFZ) publicaron recientemente un estudio en la revista Nature donde sugieren que la tensión tectónica de la placa de Anatolia es aún mayor que en 1999, así que está previsto que esta clase de terremotos sean más frecuentes y, probablemente, más intensos.