Según expertos petroleros, la comisión presidencial liderada por Tareck el Aissami, vicepresidente para la Economía y ministro de Petróleo, fracasó en el manejo de PDVSA.
El Político
Concretamente, los especialistas señalan que la comisión de El Aissami fracasó en su tarea de subir la producción y en la de inyectar dólares a la economía venezolana.
Sin embargo, el pasado mes de septiembre, Nicolás Maduro celebró la «recuperación» que ha logrado Pdvsa y postuló a la empresa como una candidata a equilibrar el mercado mundial petrolero y gasífero, que actualmente afronta una crisis debido a la guerra entre Rusia y Ucrania.
Le ofreció petróleo y gas a la Unión Europea y a Estados Unidos, con la promesa de que Venezuela «siempre estará» para «auxiliar» al mundo con sus productos energéticos.
«Le digo a Europa, a la Unión Europea, a Joe Biden, que Venezuela siempre estará aquí. Está a la orden nuestro gas y nuestro petróleo para estabilizar al mundo. Está lista y preparada para exportar nuestros productos a todos los mercados», aseguró.
Las palabras de Maduro, sin embargo, carecen de respaldo, porque su cuota de producción más bien va en caída. A pesar de que proyectó que para este año Pdvsa superaría la producción de 2 millones de barriles por día (bpd), regresando a niveles que tenía la estatal antes de 2016.
¿Por qué es importante?
La comisión presidida por El Aissami se instaló el 22 de febrero del año 2020 con la intención de incrementar la producción dse Petróleos de Venezuela (PDVSA), reportó ElNacional.
Una nota de El Nacional refiere que en enero 2020 según OPEP, Pdvsa producía 733.000 barriles al día, de acuerdo a fuentes secundarias, u 882 mil barriles al día, según comunicaciones directas de PDVSA a la OPEP.
Después de casi tres años , la producción de PDVSA para el mes de octubre de 2022 fue de 659 mil, según fuentes secundarias de la OPEP, número casi igual a la cifra de reporte directo de PDVSA a la OPEP. Así que podemos decir que son números aceptados por la estatal venezolana.
De esta manera, la producción de octubre del 2022 es de 74 mil barriles al día. Es menor a la que había cuando El Aissami tomó las riendas de PDVSA (enero del 2020).
De manera que la comisión fracasó como motor para subir la producción, bajo los propios números de la PDVSA de El Aissami. Es de hacer notar que el fracaso de la comisión es aun mayor de que lo que demuestran estas cifras.
Entre líneas
El ex zar del petróleo venezolano, Rafael Ramírez, dijo que "los niveles de producción actuales incluyen los volúmenes de diluyentes y crudos suministrados por Irán a Venezuela, los cuales se venden mezclados con el crudo venezolano; así como los volúmenes de agua que no son separados por los problemas que presenta la infraestructura de tratamiento y acondicionamiento de crudos.
Esta situación ha dado lugar a reclamos y devoluciones de cargamentos de petróleo del país. Analistas sostienen que la cantidad de diluyente puede ser superior a 100 mil barriles diarios.
De esta manera, la producción de PDVSA de enero 2020 a octubre 2022 puede haber caído realmente más de 170 mil barriles al día.
Un dato a considerar es que el fracaso de la comisión presididda por El Aissami es raramente mencionado.
En el mes de enero del 2022, Nicolás Maduro puso como meta dos millones de barriles para finales de 2022. Hoy en el mes de noviembre del 2022 la producción de PDVSA es menor que la que tenía el día que la comisión fue puesta en marcha. Este fracaso es fácilmente comprobable en cifras oficiales.
Adicionalmente, la comisión presidida por El Aissami incrementó la gasolina a precios internacionales y entrega menos fondos a la República.
En conclusión
El fracaso de El Aissami no solo se limitya a que la producción de PDVSA se redujo sino que además se incrementaron los precios de la gasolina. Es de hacer notar que en el año 2020 PDVSA todavía vendía gasolina subsidiada.
Venezuela llegó a producir 3,2 millones de bpd en 1997, cuando el chavismo todavía no había llegado al poder, y los 20 años siguientes se mantuvo por encima de los 2 millones.
Pero la industria petrolera venezolana, luego de haber sido una de las más fuertes del mundo, se vino abajo, sobre todo en el último lustro, a causa de la falta de inversión, la reducción del recurso humano calificado, la gestión, la corrupción y, más recientemente, las sanciones impuestas por Estados Unidos, según especialistas del sector.
El analista petrolero José Toro Hardy dijo que "resulta doloroso imaginar el boom por el cual debería estar atravesando Venezuela con motivo de la invasión de Rusia a Irán y el brutal impacto que está trágica acción ha tenido en los mercados energéticos mundiales".
Explicó que en el pasado, cada vez que ocurrían hechos lamentables de este tipo, el mundo volteaba la mirada hacia Venezuela, que siempre había acudido en auxilio de un mundo ávido de energía. Pero, en esta oportunidad, no estamos en condiciones de hacerlo.
Lo más lamentable es que toda esta destrucción ha ocurrido después de una de las etapas en que los precios del petróleo alcanzaron su máximo histórico.
Y ni siquiera se puede achacar esta situación a la falta de inversiones. Curiosamente, por razones inexplicables, la producción venía cayendo en momentos en que las inversiones alcanzaban niveles supuestamente muy elevados.