A los temores de una recesión se une la caída en los precios del petróleo. Uno arrastra a lo otro y ambos contribuyen al recrudecimiento de la crisis, cuyas consecuencias no se tiene previstas.
El Político
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) se desplomó este martes por los miedos a una recesión económica y perdía la barrera de los $100 a unas horas del cierre de la sesión bursátil.
Los contratos futuros del WTI para entrega en agosto caían más de un 9% y se situaban en $98.42 el barril.
Es la primera vez desde el pasado 11 de mayo en que el petróleo de referencia en Estados Unidos cotiza por debajo de los $100.
Esto como consecuencia de un fuerte retroceso que los analistas vinculan al creciente miedo a una recesión que pueda dañar la demanda de crudo.
Esos temores ya hicieron que el precio del WTI cerrase junio con pérdidas tras seis meses consecutivos al alza y parecen estar acrecentándose ahora.
Este martes, el banco Citi advirtió de que la cotización del petróleo podría desplomarse con una recesión y situar el barril de Brent en unos $65 para finales de año y en unos $45 para finales de 2023, cuando ahora está en unos $113.
El precio del crudo se disparó este año, en especial tras la invasión rusa de Ucrania, y numerosos expertos habían vaticinado hasta ahora que se mantendría en niveles altos.
El pasado viernes, el barril de WTI había cerrado en $108.43.