El primer ministro portugués, el socialista António Costa, reiteró su confianza en el titular de Finanzas, Mário Centeno, y descartó su dimisión, pese a las peticiones al respecto de la oposición tras acusarle de mentir sobre la Caixa Geral de Depósitos (CGD).
"Tengo confianza en el ministro de Finanzas, tiene la admiración de todo el país por el trabajo que ha ido haciendo y no voy a perder el tiempo", dijo Costa a los periodistas tras visitar una fábrica en Vila Real, en el norte del país, donde aseguró que la dimisión de Centeno está descartada.
Las dos formaciones conservadoras de Portugal, el socialdemócrata PSD y el democristiano CDS, acusaron a Centeno de "mentir" sobre la salida de la anterior administración del banco público CGD.
La polémica se remonta a noviembre pasado, cuando el entonces presidente de la CGD, António Domingues, y la mayoría de su equipo dimitieron después de que el Parlamento les obligase a presentar sus declaraciones de renta y patrimonio ante el Tribunal Constitucional.
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Centeno negó en varias ocasiones que existiese un acuerdo previo entre el Gobierno y Domingues para que la dirección del banco no tuviera que declarar su patrimonio ante el Constitucional.
Sin embargo, el diario portugués "Eco" divulgó esta semana una carta de Domingues dirigida a Centeno y enviada en noviembre, en la que recordaba al ministro que esa "fue una de las condiciones acordadas para aceptar el desafío de liderar la gestión de la CGD".
El gabinete de Centeno emitió el jueves un comunicado en el que le defendió de las acusaciones y repudió "la estrategia insultante y torpe del PSD y el CDS para intentar manchar su honorabilidad y el trabajo que ha realizado para solucionar los problemas del sistema financiero".
Centeno forma parte del Gobierno socialista desde su llegada al poder, en noviembre de 2015, y es uno de los "pesos pesados" del Ejecutivo e ideólogo del programa económico que el Partido Socialista presentó en las últimas elecciones legislativas.
Con información de EFE
