Con el fin de prestar declaración en su demanda contra Mirror Group Newspapers, a cuyos dirigentes acusa de pirateo telefónico y otras actividades ilícitas, el príncipe Harry llegó este martes al Tribunal Superior de Londres.
El Político
El testimonio del príncipe llegó primero por escrito, con un amplio texto en el que acusa a la empresa propietaria del The Daily Mirror de recurrir a tácticas ilegales para tratar de captar información, por ejemplo espiando sus mensajes de voz durante su etapa en el colegio de élite de Eton.
Harry, al igual que dos actores de televisión y la exesposa de un cómico, acusan al grupo mediático de obtener información sobre ellos entre 1996 y 2011 mediante métodos ilegales, incluida la piratería telefónica.
"Mis mensajes de voz incluían información increíblemente privada y delicada", afirmó el príncipe, reportó Perfil.
El príncipe, hijo del rey Carlos III y 5º en la línea de sucesión al trono, llegó a "asumir muchos de los titulares" que aparecieron en los medios, desde los que le describían como un "playboy" a los que le que lo describían como un "cabezón" o incluso "consumidor de drogas irresponsable".
"Siento que en todas las relaciones que tuve, sea con amigos, novias, familiares o en el Ejército, siempre hubo una tercera parte implicada, los tabloides", dijo Harry en el texto entregado al tribunal, según la cadena Sky News.
Panorama general
Harry denunció una "invasión de la prensa la mayor parte de (su) vida, hasta el día de hoy". "Cada uno de estos artículos me causó sufrimiento", aseguró.
"Otras personas, amigos, compañeros de escuela leían los artículos y su comportamiento cambiaba", afirmó. Esto le hizo sentir "paranoia", desconfiar de cualquiera y reducir su círculo de amistades, subrayó.
El príncipe volvió al Reino Unido para asistir al juicio que tiene lugar en Londres, ya que reside en EEUU desde que, junto a esposa Meghan Markle, decidió apartarse de sus labores como miembro de la Casa Real. En este tiempo, criticó también a su propia familia, acusándola de situaciones de acoso o racismo.
Harry, que dijo que se mudó a EEUU para proteger a su familia de la persecución mediática, dijo que sentirse vigilado le hacía "sospechar constantemente" de "todo el mundo", un aspecto que relaciona también con el caso de su madre, la fallecida princesa Diana de Gales.
"Siempre escuché que la gente decía que mi padre estaba paranoica, pero no era así. Tenía miedo por lo que le estaba pasando y ahora sé que yo también sentía lo mismo", argumentó.
El duque de Sussex defendió su interés por "llegar al fondo de una vez por todas" para que los medios rindan cuentas por lo que considera una "intrusión" en su vida privada.
En su caso, circunscribe los supuestos excesos al periodo entre 1996 y 2010 y habla de pinchazos telefónicos, engaños o contratación de detectives.
¿Por qué es importante?
¿Qué se puede esperar?
Tras la declaración del príncipe Harry en el juicio sobre espionaje telefónico en Londres, se puede esperar que se abra un debate sobre la ética y la responsabilidad de los medios de comunicación en la cobertura de la vida privada de las personas.
Es posible que se tomen medidas para restringir el acceso de los medios a la información personal y privada de las personas, y que se establezcan sanciones más rigurosas para aquellos medios que violen la privacidad de las personas.
También es probable que se produzcan cambios en la forma en que se cubren las historias de la realeza y de otras personas públicas, con un mayor enfoque en la protección de la privacidad y el bienestar emocional de estas personas.
En última instancia, la declaración del príncipe Harry puede tener un impacto significativo en la forma en que se aborda la cobertura mediática de la vida privada de las personas en el futuro.
El príncipe también lanzó una inusual crítica a los lazos entre la prensa y el gobierno británico: "Nuestro país es juzgado globalmente por el estado de nuestra prensa y nuestro gobierno, y creo que ambos están en lo más bajo", afirmó.
Y agregó: "La democracia fracasa cuando la prensa no escruta ni exige responsabilidades al gobierno, y en su lugar opta por meterse en la cama con ellos para poder garantizar el statu quo".