Con el fin de facilitar la integración y ciudadanía de inmigrantes y refugiados en Estados Unidos, como parte de una estrategia para contrarrestar la política migratoria de la Administración Trump, un grupo de legisladores demócratas ha propuesto este miércoles la creación de una oficina federal, según publicó Telemundo
El Político
Los legisladores Grace Meng, Pramila Jayapal, Sylvia García, y Jesús “Chuy” García, explicaron que el proyecto de ley, denominado “Acta del Nuevo Trato para Nuevos Estadounidenses”, tiene el objetivo de establecer programas de ayuda clave para facilitar la integración de los inmigrantes y refugiados, que con frecuencia afrontan barreras lingüísticas y trabas para encontrar empleo.
García indicó: “Nací en México y ahora represento a mi comunidad de Chicago ante el Congreso de EEUU… el Acta de un Nuevo Trato para Nuevos Estadounidenses reafirma nuestro compromiso y nuestros valores como una nación que da la bienvenida a los inmigrantes".
Agregó que “mientras que la Administración Trump continúa atacándonos, estamos construyendo los sistemas para ayudar a los inmigrantes a tener éxito, porque es lo correcto. Es hora de derrumbar el ‘segundo muro’ de bloqueos hacia la ciudadanía” de la Administración".
Hay otros legisladores que patrocinan la medida, como Jayapal y Meng, son inmigrantes naturalizados o hijos de inmigrantes.
Es de hacer notar que actualmente los inmigrantes, y sus hijos nacidos en EEUU, conforman más de una cuarta parte de la población nacional, y la idea de la medida es reconocer sus contribuciones al tejido económico y cultural en este país. Hay más de nueve millones de residentes permanentes elegibles para la ciudadanía.
Hay que tomar en cuenta que el proyecto de ley pide ampliar y facilitar el proceso de ciudadanía para inmigrantes y refugiados; crear una oficina federal de Ciudadanía y Nuevos Estadounidenses; restablecer el tope anual de ingreso de refugiados a 110,000, y promover el aprendizaje del inglés y la capacitación laboral.
También crearía un programa de asistencia legal para apoyar la labor de organizaciones que proveen ayuda a inmigrantes en trámites de ajuste migratorio, solicitud de ciudadanía o protección de la deportación.
La iniciativa reduciría de 21 a 18 años la edad en la que personas con ciudadanía estadounidense pueden solicitar la residencia permanente para sus familiares y prohibiría la deportación de inmigrantes que se conviertan en “carga pública” al recibir beneficios del gobierno.
Por otra parte, impondría una cuota única para el proceso de ciudadanía, enmendaría los requisitos de inglés y examen de cívica para personas en edad avanzada y eliminaría el examen de ciudadanía por completo para extranjeros graduados de secundaria.
También restringiría la capacidad de la Oficina de Servicios de Inmigración y Ciudadanía de aumentar las tarifas de sus servicios, sin la venia del Congreso.
Un dato a considerar es que la “Oficina Nacional de Nuevos Estadounidenses” estaría bajo el paraguas de la Casa Blanca que, además, coordinaría esfuerzos de integración con autoridades locales, estatales y federales.
La medida cuenta con el apoyo de un amplio abanico de individuos y organizaciones de corte progresista de todo el país, entre éstas CASA de Maryland, America´s Voice, la Alianza Nacional para Nuevos Estadounidenses, la Coalición de Florida para Inmigrantes, Make The Road, la Coalición para los Derechos Humanos de los Inmigrantes, y el Centro para la Democracia Popular.
Con información de: Telemundo