Organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes en EEUU manifestaron su preocupación por la reciente aprobación en Florida de una ley que establece un programa de reubicación de indocumentados, la cual podría dar pie a una ola de detenciones motivadas por el perfil racial en este estado y el resto del país.
El Político
En rueda de prensa desde Jacksonville, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, criticó las políticas migratorias del presidente Joe Biden, a quien responsabilizó de la “afluencia de drogas y otros problemas” en la frontera sur del país, reportó ImpactoVenezuela.
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¿Por qué es importante?
Para la Coalición de Inmigrantes de Florida (FLIC), DeSantis “está liderando el camino para hacer retroceder el reloj en materia de derechos humanos” y que los residentes vivan con el “temor de un gobierno que se extralimita en todos los rincones de sus vidas”.
La organización está integrada por una decena de organizaciones proinmigrantes que reaccionaron de inmediato ante el anuncio de DeSantis. Sus integrantes dijeron que sus medidas son “draconianas” y están encaminadas a “oprimir a los migrantes que buscan seguridad en Florida”.
Por su parte, la abogada Shalyn Fluharty, directora ejecutiva de la organización Americans for Immigrant Justice, explicó que «no hay una definición real de esa categoría y suscita dudas sobre la posible aplicación de perfil racial en todo Estados Unidos».
I visited NYC, Chicago, & Philadelphia to meet with the men & women of law enforcement to discuss FL's commitment to law & order.
Woke policies enacted by Leftist politicians have proven to be disastrous & these cities need to embrace law & order policies & support the police. pic.twitter.com/qvv71iryVP
— Ron DeSantis (@RonDeSantisFL) February 21, 2023
En contexto
El programa tiene su antecedente en el traslado aéreo en septiembre pasado de medio centenar de inmigrantes, la mayoría venezolanos que habían cruzado desde México para solicitar asilo en EEUU desde San Antonio (Texas) hasta Martha’s Vineyard, en Massachusetts, a bordo de un avión fletado por la Administración de DeSantis.
Aquel trayecto generó una gran polémica y demandas judiciales contra DeSantis y el estado de Florida, pues los inmigrantes no estaban en ese territorio y además presuntamente fueron inducidos a abordar el vuelo con promesas engañosas.
Florida’s Next Steps to Fight Biden’s Border Crisis https://t.co/1dS98DUDw1
— Ron DeSantis (@GovRonDeSantis) February 23, 2023
Entre líneas
Durante una rueda de prensa, DeSantis anunció sus “medidas enérgicas” contra los migrantes indocumentados en su estado.
Dentro del conjunto de medidas que podrían “desincentivar la inmigración ilegal en Florida”, está que se obligará a los hospitales a recopilar datos sobre el estatus migratorio de pacientes.
Adicional deberán presentar periódicamente informes sobre el coste de la atención brindada a los extranjeros ilegales.
En materia de educación, DeSantis propone la derogación de una ley de 2014 patrocinada por la teniente gobernadora Jeanette Núñez cuando era legisladora de Florida que ofrecía cupones de matrícula fuera del estado a algunos “dreamers” elegibles, los niños inmigrantes indocumentados traídos a Estados Unidos a una edad temprana.
DeSantis fue tajante en este punto “Si queremos mantener la línea de matrícula, entonces debes decir que ‘necesitas ser ciudadanos estadounidenses que viven en Florida’”.
Al tiempo que agregó “¿Por qué subsidiaríamos a un ciudadano no estadounidense cuando queremos asegurarnos de que podamos mantenerlo asequible para nuestra propia gente?”.
Florida will not turn a blind eye to the dangers of Biden’s Border Crisis.
We are proposing additional steps to protect Floridians from these reckless federal policies, including mandatory E-Verify and prohibiting local government from issuing ID cards to illegal aliens. pic.twitter.com/tdrZ0Jw2wY
— Ron DeSantis (@GovRonDeSantis) February 23, 2023
En conclusión
El paquete de propuestas presentado por el gobernador bajo el nombre de “La lucha de Florida contra la crisis fronteriza de Biden” incluye “mejorar” las sanciones por tráfico de personas y contempla como “delito grave de tercer grado” transportar, ocultar o albergar a extranjeros ilegales, sancionado con hasta cinco años de prisión.
La ley SB 6B, que tras su aprobación en el Legislativo floridano fue firmada el miércoles por su promotor, el gobernador Ron DeSantis, permite el traslado de inmigrantes que no necesariamente estén en Florida a otras partes del país, como ocurrió cuando en septiembre pasado envió a casi 50 indocumentados desde Texas hasta Massachusetts.
El texto firmado por el gobernador republicano , establece un fondo de 10 millones de dólares e incluye categorías que, de acuerdo con los activistas, no existen en el marco legal migratorio, como es el caso de «extranjeros no autorizados inspeccionados», una categoría que podría abarcar a muchas personas.
No obstante, la nueva ley ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones proinmigrantes y del Partido Demócrata de Florida, que la han calificado de «juego político» y parte de una estrategia de DeSantis para apuntalar su figura en el ámbito nacional entre los republicanos con miras a una posible aspiración presidencial.
La Coalición de Inmigrantes de Florida (FLIC) también rechazó la propuesta legislativa de DeSantis, por considerar que quiere “evitar el acceso de los inmigrantes a la atención médica, la educación y criminalizar a cualquier floridano que transporte o brinde refugio a una amplia categoría de inmigrantes”.
