El Presidente Joe Biden y los congresistas demócratas trabajan actualmente en rescatar a los inmigrantes que han vivido en Estados Unidos durante décadas con un estatus migratorio legal “temporal”.
El Político
Sin embargo, el gobierno de Biden está otorgando simultáneamente ese mismo estatus a otros cientos de miles de inmigrantes, poniéndolos en riesgo de quedar atrapados en un limbo similar.
Los problemas que plantea el programa de Estatus de Protección Temporal (Temporary Protected Status, TPS) salieron a la luz la semana pasada, cuando la administración utilizó la autoridad ejecutiva para conceder esa calidad migratoria a hasta 300 mil venezolanos y unos 1,600 birmanos que se encuentran actualmente en Estados Unidos y que se consideran incapacitados para regresar a su lugar de origen de manera segura debido a las emergencias humanitarias que existen en sus países, reportó Propublica.
Inmigrantes esperan
Los activistas y algunos demócratas electos están presionando al gobierno de Biden para que autorice más otorgamientos de TPS para inmigrantes cuyos países de origen sufren guerras, desastres naturales u otras emergencias, incluidos los haitianos que llegaron a Estados Unidos después de 2011 y los cameruneses.
Sin embargo, actualmente no existe nada que garantice que cualquiera de estos inmigrantes tenga una vía para conseguir la ciudadanía en el futuro. Aunque la Cámara de Representantes esté trabajando en proyectos de ley que crearían esa trayectoria para quienes ya tienen TPS — sobre todo la Ley de los Sueños y la Promesa (Dream and Promise Act), que la Cámara votará esta semana — esas propuestas no corresponden a las personas que obtengan un estatus temporal actualmente, o a quienes pudieran obtenerlo en el futuro.
Esto amenaza con dejarlas en un estado de incertidumbre que se ha vuelto demasiado común en los 30 años desde que el Congreso creó el programa de TPS: a menudo el amparo no es exactamente temporal, pero tampoco es precisamente permanente.
Tenuidad del TPS
El presidente Donald Trump puso en evidencia la tenuidad del TPS cuando intentó quitarle la protección al 95 % de los inmigrantes; que se beneficiaban de este, proporcionando lo que Erik Villalobos, de la Alianza Nacional del TPS calificó como una “llamada de atención” para muchos inmigrantes que se habían acostumbrado a estar cómodamente en Estados Unidos y dependían del TPS para seguir en el país.
Una demanda judicial logró frenar los esfuerzos de Trump, y, hasta ahora, el gobierno de Biden; ha adoptado un enfoque generoso al extender el TPS a nuevos países y renovar las concesiones existentes.
Sin embargo, las incertidumbres de los últimos cuatro años han hecho que tanto los inmigrantes como los demócratas; elegidos se dieran cuenta de que “quizás se deba analizar lo que temporal significa en realidad”, según lo expresó Villalobos.
Temporal de TPS no ayuda a inmigrantes
De acuerdo con la ley actual, se supone que lo “temporal” del TPS representa una solución provisional para inmigrantes; que podrían regresar a su país en un futuro próximo, cuando su país se recuperara de una crisis momentánea.
El Congreso creó el programa en 1990, después de años de frustración por la negativa del Presidente Ronald Reagan; de conceder ayuda a los inmigrantes salvadoreños en Estados Unidos que habían huido de la brutal guerra civil de ese país.
El Congreso ordenó el uso del TPS para El Salvador, y autorizó al poder ejecutivo a añadir países a la lista si pasaban; por un conflicto armado desastres naturales o alguna otra “condición extraordinaria y temporal” que hiciera peligroso el retorno. No fijó límites en la cantidad de personas que podrían obtener esta calidad migratoria.