Vladimir Putin es un artífice de la maniobra militar-polítca, y de ella saca las cartas más sorprendentes para continuar con su sueño más profundo: Devolverle a Rusia el dominio territorial que poseyera la desaparecida Unión Soviética.
El Político
Si bien no le resulta fácil reapoderarse directamente de naciones como los estados bálticos (Letonia, Lituania, Estonia) o Ucrania, estimula confrontaciones internas en esos países. Donde se crean gobiernos manejados por individuos prorusos, como el caso de Donbass, Donetsk o Lugansk que le fueron cortadas a Ucrania por rebeldes separatistas.
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Putin no quiere de ninguna manera que Ucrania entre a formar parte de la OTAN. Para ello ha amenazado, enviado miles de soldados y hasta anunciado que hará acciones militares para impedirlo.
Pero ante la postura de la administración Biden se ha visto precisado a adoptar una nueva táctica. Retiró diez mil soldados de la frontera ucraniana “ en un paso de buena voluntad”.
Lo que no dijo es que mantiene cerca de 200 mil hombres en esa atosigada frontera.
Anunció, eso sí, que a comienzos de 2022 habrá conversaciones en Ginebra con Washington y la OTAN para discutir las demandas en materia de seguridad presentadas por Moscú. Como condición para acabar con las actuales tensiones en torno a Ucrania.
Dijo haber observado una actitud "positiva" por parte de Washington y Bruselas a sus exigencias sobre seguridad.
Veremos si Occidente le permite al líder ruso seguir maniobrando.
Fuente: Agencias
