La mujer en cualquier sociedad merece respeto y consideración; no solo por su condición de fémina creadora de vida, sino por ser un ser humano. Ahora, con los talibanes usurpando el poder en Afganistán, mostraron lo que ocurrió después de la llegada de EEUU a esa nación.
El Político
Después de 20 años de un discurso sobre la libertad, la democracia y la guerra contra el terrorismo, además del gasto de billones de dólares e innumerables muertes del pueblo afgano; volvieron de nuevo al poder los talibanes.
Según el portal de izquierda Viento Sur: "durante ese periodo, se conformó un gobierno títere, inmerso en una lógica de corrupción y un aumento exponencial de la exportación de opio."
"Pese a que, en una pequeña parte del país, se produjeron algunos avances en las posibilidades de vida, estudio y carrera para las mujeres afganas, en otras partes, seguían vigentes las restricciones, la violencia y los azotes. Los talibanes siguieron organizándose bajo la ocupación. Las tecnologías de vigilancia ensayadas por Estados Unidos son ahora instrumentos para el Talibán ejercer su poder", aseguró Viento Sur: portal que se define "contra el capitalismo" .
Sin embargo, según el Twitter de @HistoriaEnFotos:
Mujeres afganas exigen seguridad y derecho a trabajar.
Salir a protestar en medio de esa situación actual es de admirar y aplaudir. Cuánta dignidad y valentía. ??
pic.twitter.com/ugEAS4UEdG— Imágenes Históricas (@HistorieEnFotos) August 17, 2021
¿Qué le espera a las mujeres en Afganistán bajo los talibanes?
Los talibanes esperaron 20 años para volver al poder: supuestamente su promesa es restaurar la paz y la seguridad y hacer cumplir su propia versión austera de la sharia (ley islámica): no obstante, una de las más afectadas son las mujeres, adolescentes y niñas.
Antes de caer bajo EEUU, las acciones que tomaron los talibanes contra las mujeres afganas fueron: obligarlas a abandonar sus estudios, no salir a los balcones o asomarse a las ventanas de sus casas para no ser vistas; o usar el mismo transporte que los hombres; indicó El Espectador.
Este calvario lo vivieron las mujeres de Afganistán hasta el 2001. Luego fueron 20 años de una relativa apertura y libertad; y ahora con el regreso de los talibanes al poder, las mujeres afganas temen que sus vidas se vean de nuevo anuladas.
El pensamiento de izquierda justifica a los talibanes asegurando que "las intervenciones militares son una estrategia imperialista de EE UU. para imponer su política y los intereses de sus multinacionales", destacó Viento Sur.
Pero no pueden dejar de lado los logros que obtuvieron las mujeres gracias a la llegada de la democracia.
¿Qué se dijo en la Marcha Mundial de las Mujeres en 2001?
Durante la Marcha Mundial de las Mujeres en 2001, declararon: "La guerra no soluciona lo más mínimo de los problemas que están a la raíz de la violencia y no hará más que agravar la pobreza y la humillación de las poblaciones afectadas. (…)", informó Viento Sur.
"Habrá gobiernos que aprovecharán esta situación para nutrir la xenofobia, cerrar todavía más sus fronteras para erigirse en fortalezas contra las personas inmigrantes y refugiadas; para amenazar y hasta suprimir los derechos civiles y las libertades fundamentales, en particular de las mujeres, y para criminalizar todo movimiento de oposición a la mundialización neoliberal y sexista actual”, manifestó el portal de izquierda.
No obstante, a pesar de ello, la situación de las mujeres de Afganistán siembre ha sido motivo de alarma. Los peligros para la vida de las mujeres son centrales, pero no pueden ser analizados de forma aislada.
La afgana que lucha por los derechos de las mujeres de su país
Después que el Talibán tomó a Kabul, el pasado 17 de agosto de 2021, la revista Capire entrevistó a una afgana que lucha por los derechos de las mujeres; su identidad no se revelará por razones de seguridad y por lo delicado de las circunstancias actuales.
Ella vivió dos años como refugiada en Pakistán y regresó a su país en 2003, donde continuó estudiando hasta el 2018.
Actualmente vive en Alemania. La entrevista que concedió a la revista Capire tiene como objetivo: ayudar a entender la situación desde el punto de vista de las mujeres afganas.
De esa forma se podrá comprender mejor lo que ocurre y puede lograrse la empatía con las féminas de ese país tomado por los talibanes.
La situación en mi país, Afganistán es una pesadilla
A continuación la entrevista completa realizada en la revista Capire :
Nos gustaría difundir lo que está sucediendo en Afganistán actualmente desde la perspectiva y la experiencia de las mujeres del país. ¿Qué opina de la actual coyuntura afgana?
La situación en mi país es una pesadilla para la población, especialmente para las mujeres. Todo se derrumbó en cuestión de horas: el trabajo duro de las mujeres que estaban luchando por sus derechos y por la escasa visibilidad que empezaban a tener en la vida pública, conquistando la participación en instituciones gubernamentales y el acceso a la escuela y la universidad. Poco a poco empezaron a confiar en la democracia y en la posibilidad de tener derechos y plantearse un futuro mejor.
La situación es terrible. Hoy vivo en Occidente, en Europa, así que sólo puedo imaginar cómo están viviendo las mujeres en mi país. Desgraciadamente, algunas mujeres de mi familia que asistían a la universidad no pueden seguir estudiando en este momento. Aunque el Talibán haya anunciado que no habrá restricciones, nadie se fía, teniendo en cuenta lo que hacían hace 20 años. Los crímenes que cometieron en ese periodo siguen vivos en la memoria de la gente.
La gente dice que no sabe qué esperar del futuro. Todos tienen miedo de convertirse en blanco del Talibán. Todos sufren, pero el blanco más fácil son siempre las mujeres. La gente tiene miedo de salir a trabajar y que le sigan a casa, por temor a que le hagan algo a su familia. El silencio en Kabul es aterrador. No se oye a nadie, ni siquiera a los niños jugando en la calle.
Kabul está en el corazón de Afganistán y la mayoría de las activistas vivían allí. Algunos periodistas han vuelto a salir al aire hoy. He visto unos videos de Kabul que muestran que algunas presentadoras han vuelto a aparecer en las cadenas de televisión privadas. A la vez, la gente no puede fiarse de toda la situación. Las cosas pueden cambiar después del 31 de agosto, porque ese será el último día para que los estadounidenses completen la evacuación.
Soldado talibán en Afganistán afirma: “implementar lo que la sharía"
Tal vez los talibanes sólo estén mostrando un lado más moderado por el momento, pero después de formar el gobierno, las cosas pueden cambiar. Hay un video en el que se le pregunta a un soldado talibán específicamente sobre las mujeres y contesta que quieren “implementar lo que la sharía[1] dice sobre las mujeres”, señalando que las mujeres tendrán que seguir el código de vestimenta de la sharía.
Se le salió que cree que las mujeres deberían quedarse en casa. Al mismo tiempo, sus líderes dicen que las mujeres podrán tener acceso a sus estructuras y que son necesarias y forman parte de la sociedad. De alguna manera lo demuestran, pero los soldados en los territorios dicen otra cosa.
¿Cuál es le sentimiento de los afganos hacia EEUU?
Algunos dicen que Estados Unidos ha fracasado en Afganistán, mientras que otros dicen que este era su objetivo. ¿Qué significaron los últimos 20 años de ocupación estadounidense en su país?
Cuando Estados Unidos ocupó Afganistán, la expectativa que tenían los afganos en ese momento era de que se produjera un cambio. Pero no ocurrió nada fundamental. Volvieron al gobierno afgano y al mismo tiempo mantuvieron cierta relación con el Talibán, en el sentido de que no lo presionaron, aunque intentaran demostrar que combatían al grupo.
En general, la población de las aldeas empezó a oponerse a Estados Unidos, y una de las principales razones fueron los bombardeos que se estaban llevando a cabo. Estaban matando a civiles.
La gente empezó a tener este sentimiento contra los estadounidenses, pero eso no significaba que quisiera a los talibanes en el poder. Ya había vivido el periodo de control talibán y sabía lo que significaba.
Durante los últimos 15 años, mi pueblo estuvo bajo su control en cierta medida. A las niñas sólo se les permitía estudiar hasta el sexto grado, no más que eso. La gente sabía que los talibanes no le iban a dar nada. Quería el apoyo del gobierno, quería que el gobierno se hiciera más fuerte. Creía en ese pedacito de democracia que ofrecía el gobierno.
No pedimos a Estados Unidos que se queden. No queremos la ocupación. El problema es la forma como han dejado todo, es el vacío que han promovido. Literalmente tiraron a los afganos a los leones. Esto es lo que hacen: se llevan lo que quieren y los dejan ahí. En este momento, los afganos están viviendo una terrible sensación de pánico.
Las personas quieren un gobierno democrático, con representantes y elecciones, donde las mujeres puedan tener sus derechos garantizados. Incluso con 20 años de ocupación, Estados Unidos no han hecho nada para eso. Se trató apenas de una exhibición al mundo.
Los afganos tenían un Parlamento y las niñas iban a la escuela; esta es la única imagen que Estados Unidos quieren que el mundo conozca. Pero son las familias afganas las que deben recibir los méritos. Fueron ellas las que mandaron a sus hijas a estudiar, al colegio, a la universidad. Y podían trabajar. Durante ese tiempo, como las mujeres eran blanco de ataques, hubo secuestros y atentados suicidas. Sin embargo, el pueblo debería llevarse el mérito de nuestra seguridad, no Estados Unidos ni el gobierno títere que no nos ha ayudado.
Ahora la población está muy enfadada, especialmente las mujeres. Creen que los estadounidenses deberían haber abandonado el país de forma adecuada, a través de los medios apropiados. La gente no pidió que vinieran. Bin Laden fue asesinado en Pakistán, no aquí. Vinieron y ahora nos dejan de nuevo con un grupo medieval que viene a apoderarse del país.
¿Qué significa esta situación para la coyuntura regional e internacional?
Ahora mismo, todo el mundo está confundido, incluidos los talibanes. No tienen una agenda, no saben cómo formar un gobierno ahora. La situación es un poco confusa para todos. Hoy China ha declarado que reconocerá el gobierno talibán, y Turquía ya ha expresado su apoyo al grupo. Esto lo legitima.
Las cosas cambiaron mucho en los últimos 20 años en lo que respecta a la conciencia de las mujeres sobre sus derechos y el acceso a los medios de comunicación e Internet. Así que los talibanes están mostrando un lado más moderado para ganar algo de reconocimiento, al menos entre los países de la región. Es un momento confuso, pero lo vamos a entender mejor después del 31 de agosto. Todo fue muy repentino.
¿Existe una salida para Afganistán?
Una de las preguntas claves de la entrevista ala mujer afgana fue la siguiente:
¿Cuál sería una salida posible para Afganistán y cómo podría ser el apoyo internacional, teniendo en cuenta el aumento del número de personas afganas que pasarán a ser refugiadas?
Cuando el resto del país cayó en manos de los talibanes, una provincia tras otra, la gente se refugió en Kabul. En un periodo de tres o cuatro días, más de 20.000 personas huyeron a la capital. Cuando los talibanes llegaron a Kabul, la gente empezó a intentar salir del país. Esta es una de las cosas que hay que mostrar al mundo: la población no apoya a los talibanes, quiere dejar el país a cualquier precio.
Las tres personas que fallecieron al intentar esconderse en el avión que despegaba… este terrible episodio demuestra que la gente quiere irse.
Los alrededores del aeropuerto de Kabul están abarrotados porque la gente cree que va a poder salir. Incluso las Naciones Unidas han hecho un llamamiento a los países vecinos para que acepten a los refugiados. La gente no quiere vivir bajo el control del Talibán porque no sabe cuál será el futuro de sus hijos.
Las mujeres en Afganistán: Blanco fácil
En una situación muy ideal, puede que los talibanes hayan cambiado realmente y permitan a las mujeres trabajar, que no interfieran en la educación de las niñas, que permitan a las mujeres acceder a la universidad. Pero tenemos ejemplos de países como Irán y Arabia Saudí, donde las mujeres son reprimidas y se convirtieron en un blanco fácil. Los intelectuales no tienen libertad para trabajar, las personas que defienden los derechos humanos no pueden actuar.
Los talibanes no se quedarán atrás. Esto es lamentable, porque mucha gente estaba empezando a tener una vida. Si uno tenía un pedacito de tierra en tu pueblo, sabía que podía usarlo. Los habitantes de Kabul empezaban a tener sus propias casas. Hace unos años, los afganos también querían abandonar el país, pero no así, en un número tan elevado. En ese momento, debido a los asesinatos de los hazara[2], por la pobreza. Ahora serán millones en los próximos meses.
¿Qué acciones de solidaridad internacional pueden emprender los movimientos sociales y feministas en este momento?
El mayor apoyo es hacer oír la voz del pueblo afgano, de las mujeres afganas. Esta es la mayor acción de solidaridad, apoyo y ayuda que pueden recibir. No se olviden de nuestro país. Hoy estamos en las noticias, pero dentro de unas semanas, cuando el Talibán anuncie su gobierno, la situación se calmará y ya nadie se va a preguntar qué pasa en el país.
Una vez que el tema esté fuera de los titulares, entonces comenzará el trabajo duro. En ese momento, nuestras mujeres necesitarán a sus compañeras internacionales para alzar la voz.
Me temo que en algún momento se cortará el internet. Esto podría suceder porque los talibanes podrían no querer que se documenten sus crímenes. Así que estas voces deben llegar a todos los rincones del mundo, para no dejar solas a las mujeres afganas. Hay gente que dice que si lo que ocurre es pacífico, como afirma el Talibán, está bien. No está bien. Un cementerio también puede ser pacífico. No queremos que nuestro país se convierta en un cementerio.
[1] La sharía es la ley islámica, basada en el Corán y los hadices, textos complementarios de esa fe. Se adopta en varios países de mayoría musulmana.
[2] Los hazara, de mayoría musulmana chiita, fueron uno de los mayores grupos étnicos de Afganistán, representando alrededor del 67% de la población del país. Se calcula que más de la mitad de esta comunidad fue masacrada a finales del siglo XIX y hasta hoy es uno de los principales blancos del Talibán.