La ayuda de China podría ser un impulso crucial para las esperanzas de éxito de Vladimir Putin en el campo de batalla en los próximos meses en Ucrania.
El Político
China está estudiando la posibilidad de enviar a Moscú munición y artillería, según funcionarios estadounidenses, lo que podría ser especialmente crucial a medida que la guerra avanza hacia su segundo año, en el que es probable que las líneas del frente estén dominadas por brutales duelos de artillería.
China ha acusado a Estados Unidos de "desinformación" por estas afirmaciones y ha dicho que Washington debería mantenerse al margen de su relación con Putin.
Pero puede estar bien equipado para apoyar al ejército ruso en caso de que decida hacerlo, según los expertos consultados por NBCNews.
Peligro por armamento de Putin
Con Rusia inmersa en una nueva ofensiva en la región oriental de Donbás, las reservas existentes de China de artillería y municiones antiguas -algunas de fabricación rusa y que podrían utilizarse fácilmente- podrían dar al ejército de Rusia el respiro necesario para seguir luchando en una guerra que ya ha durado mucho más de lo que el Kremlin había planeado.
"Desde el final de la Guerra Fría hasta aproximadamente mediados o finales de la década de 2000, China fue el cliente extranjero más importante de la industria de defensa rusa", afirma Lukas Fiala, coordinador de proyectos de China Foresight, un programa de investigación de la London School of Economics.
A pesar de la disminución de la dependencia de las importaciones rusas y el giro hacia los sistemas de armamento de fabricación nacional, dijo, China todavía tiene un "contingente considerable de equipos rusos".
EEUU otorgó armas a Ucrania
Hasta ahora, las armas de largo alcance suministradas por Estados Unidos, como la artillería HIMARS, han demostrado ser muy eficaces en el campo de batalla, permitiendo a Ucrania recuperar grandes franjas de territorio que Rusia se había anexionado al alcanzar objetivos muy por encima de su capacidad anterior, ayudando a sentar las bases para contraofensivas de gran alcance.
El bando ruso también ha dependido en gran medida de la artillería.
"El ejército ruso ha demostrado que una de las pocas cosas que puede hacer es saturar las zonas con artillería", afirmó Phillips O’Brien, profesor de estudios estratégicos de la Universidad de St. Andrews (Escocia).
Pero ese éxito ha tenido un alto coste y puede haber agotado los suministros de Putin.