Estados Unidos, la Unión Europea y varios países latinoamericanos rechazaron la Asamblea Constituyente impulsada por el presidente venezolano Nicolás Maduro, al considerarla ilegítima y alertar que aumenta las tensiones en ese país sumido en una profunda crisis política y económica.
Estados Unidos llamó "dictador" a Maduro este lunes, le aplicó sanciones jurídicas y financieras y lo comparó con los gobernantes de Zimbabue, Siria y Corea del Norte, al tiempo que afirmó que evaluaría implementar medidas adicionales contra su gobierno.
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Por su parte, España aseguró que "no reconocerá una Asamblea Constituyente que no sea resultado de un amplio consenso nacional, elegida conforme a reglas democráticas de sufragio universal libre, igual, directo y secreto".
La votación, en la que no participó la oposición por considerarla "fraudulenta" y en la que según las autoridades electorales participaron 8 millones de personas, reforzó la creciente presión internacional sobre el gobierno de Maduro.
Fuente: AFP.