La decisión obedece a la incertidumbre de cómo se usará la nueva ley de seguridad impuesta por China a la antigua colonia británica
El Político
Dominic Raab, el ministro británico de Exteriores, anunció este lunes en la Cámara de los Comunes que su gobierno suspenderá el tratado de extradición con Hong Kong «de forma inmediata e indefinida», y explicó a los parlamentarios que la decisión se debe a la «incertidumbre» acerca de cómo se usará la nueva ley de seguridad impuesta por China a la excolonia británica.
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De esta manera, la cuerda continúa tensándose entre China y Reino Unido.
Raab dejó claro además que el tratado «no se reactivará a menos y hasta que haya, garantías claras y sólidas de que no hará un mal uso de la misma».
Añadió que esta es una «respuesta razonable y proporcionada» al fracaso de China de cumplir con sus responsabilidades. La nueva ley de seguridad nacional penaliza a los disidentes políticos y el tratado vigente hasta el momento podría obligar a Londres a devolver a hongkoneses que buscaran refugio en las islas británicas.
Embargo de armas
Raab también anunció la puesta en marcha de un embargo de armas, específicamente, el Ejecutivo prohibirá la exportación de equipos antidisturbios. El ministro aseveró ante los diputados que pese a que Reino Unido quiere mantener lazos de cooperación con China, está «profundamente preocupado por los eventos en Hong Kong» y por la represión de la población uigur en la provincia china de Xinjiang.
Tras las acusaciones
Y es que el anuncio llega después de que Raab acusara este domingo a China de «abusos graves y atroces contra los derechos humanos» contra la población uigur.
«Está claro que están ocurriendo abusos graves de los derechos humanos. Estamos trabajando con nuestros socios internacionales en esto. Es muy, muy preocupante», dijo Raab, quien afirmó que los informes de esterilizaciones forzadas y de campos de concentración, «recuerdan algo que no hemos visto en mucho, mucho tiempo».
La escalada de tensión entre Londres y Pekín ha ido en aumento en las últimas semanas. Por un lado, por las fricciones con respecto a la represión en Hong Kong y a la decisión de Reino Unido de aumentar los derechos de los tres millones de hongkoneses portadores del pasaporte británico de ultramar para que incluso puedan aspirar a la nacionalidad británica en caso de que quieran huir de la isla, y por otro, tras la prohibición al gigante de las telecomunicaciones Huawei de suministrar equipos para la red móvil 5G en Reino Unido.
«Creo que el Reino Unido debería tener su propia política exterior independiente en lugar de bailar al son de los estadounidenses, como sucedió con Huawei», declaró Liu Xiaoming, embajador de China en Reino Unido.
Preguntado al respecto por la mañana, antes de que el anuncio del gobierno sobre el tratado fuera oficial, el portavoz del ministerio de Exteriores chino, Wang Wenbin, instó a Reino Unido a «no ir más lejos por el camino equivocado».
(Con información de ABC)