La relatora especial de la ONU ha denunciado que el despacho del presidente Nicolás Maduro no ha respondido a varias solicitudes de información enviadas por la organización. Esta falta de comunicación dificulta el trabajo de la ONU para monitorear la situación de derechos humanos en Venezuela.
Desde hace tiempo, los expertos y relatores de la ONU han intentado obtener datos y acceso para evaluar las condiciones en el país, pero muchas de sus peticiones han sido ignoradas o respondidas con retrasos considerables.
Esta actitud genera preocupación, especialmente en un contexto donde se han reportado graves violaciones de derechos humanos.
La relatora destacó que la cooperación de las autoridades venezolanas es fundamental para garantizar la transparencia y permitir que la comunidad internacional pueda ayudar a proteger los derechos de la población.
Sin embargo, hasta ahora, el gobierno de Maduro no ha mostrado disposición para colaborar plenamente con estos mecanismos internacionales.
Esta situación pone en evidencia la falta de apertura del gobierno venezolano y complica los esfuerzos por buscar soluciones que mejoren la realidad del país. La ONU sigue insistiendo en la importancia del diálogo y la colaboración para avanzar en la defensa de los derechos humanos en Venezuela.