A pesar de la oposición, especialmente del Estado de Israel, es casi seguro que la república islámica de Irán renueve el acuerdo nuclear con la comunidad internacional.
El Político
El gobierno de Joe Biden ha utilizado su peso diplomático, y todas las estrategias de negociación para que el presidente iraní, Ebrahim Raisi, acate una serie de normativas y abandone la utilización de la energía nuclear como fin bélico.
Adios colaboración petrolera iraní
Las últimas movidas de la diplomacia estadounidense parecieran concretar el desarme de la cooperación petrolera entre Irán y Venezuela, con la que las dos naciones han sobrevivido a las sanciones internacionales.
En los últimos años, Irán designó un equipo de funcionarios que intentaron por años reactivar la maltrecha producción petrolera venezolana. No han habido resultados satisfactorios.
Una investigación del portal argentino Infobae, "los intereses y planes de Teherán respecto a Venezuela podrían cambiar; de hecho así parece".
En Caracas saben que si Irán renueva el acuerdo nuclear con la comunidad internacional ya no necesitará del comercio clandestino con PDVSA.
El flujo de dinero que ingresa a la teocracia como consecuencia del tráfico de petróleo se lograría con otros ocios.
Cómo sigue la relación Teherán-Caracas
De hecho, Irán ya estaría preparando nuevos acuerdos con países más ricos, y sin sanciones.
Con esas naciones mantendría negocios lícitos y, en consecuencia, el interés iraní con respecto al crudo chavista disiminuiría drásticamente.
Sin embargo, la teocracia iraní mantendría los negocios con Miraflores relacionados con lo militar en los que interviene la peligrosa Guardia Revolucionaria Islámica.
El entorno de Maduro asegura estar preparado para la probabilidad de que Irán se retire de los negociados y las triangulaciones con barcos fantasmas.
Apuesta a una reactivación de las deterioradas refinerías de PDVSA, pero están conscientes que crecimiento visto en los últimos meses se interrumpirá .
La alta jerarquía chavista que controla los negocios petroleros ve con recelo que el crudo iraní pueda volver a ser comercializado en los mercados internacionales.
Los representantes de Maduro estarían considerando que que los tratados que firman son cada vez más precarios y podrían caer de un momento a otro.
