El rey de España lanzó este miércoles una velada advertencia a los independentistas de Cataluña al conmemorar 40 años de las primeras elecciones en democracia, recalcando que "fuera de la ley" reina la "arbitrariedad".
"La intolerancia, la discordia y la falta de entendimiento entre los españoles constituyen una realidad innegable de ese periodo político en nuestra historia" señaló Felipe VI en referencia a las elecciones del 15 de junio de 1977.
El rey se expresaba durante une solemne sesión en el Congreso para celebrar las primeras legislativas, tras la muerte del dictador Francisco Franco en 1975, después de 36 años de dictadura y una Guerra Civil (1936-1939).
El hijo de Juan Carlos I, quien fue colocado en el trono por Franco y abdicó en 2014 tras un reinado que lo convirtió en personaje clave en la transición a la democracia, llamó a defender la "unidad nacional, asumiendo la diversidad territorial de España con orgullo".
Esa "convivencia (…) fundamenta la paz, la libertad y el progreso", por ello "ningún camino que se emprenda en nuestra democracia puede, ni debe, conducir a la ruptura de la convivencia", dijo en su discurso, en momentos de fiebre independentista en Cataluña.
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"Dentro de la ley es donde cobran vigencia los principios democráticos (…) y fuera de la ley, nos enseña la historia, solo hay arbitrariedad, imposición e inseguridad", abundó el jefe de Estado.
El gobierno independentista de Cataluña está decidido a celebrar el 1 de octubre un referéndum de autodeterminación para la región, considerado ilegal por el Tribunal Constitucional español y repudiado por el gobierno central del conservador Mariano Rajoy.
Cuando iba a tomar la palabra el rey, diputados del Partido Demócrata Catalán (independentista), del presidente regional catalán Carles Puigdemont, mostraron carteles con una urna en defensa del referéndum.
Antes de la sesión solemne, el partido de izquierda radical Podemos encabezó un acto para recordar a las víctimas de la dictadura franquista, que a juicio del líder de la formación, Pablo Iglesias, son "los grandes olvidados de la democracia".
El Rey sin embargo aseveró, en un discurso muy aplaudido, que la Guerra Civil y la dictadura fueron "una inmensa tragedia sobre la que no cabía fundar el porvenir de España".
AFP
