La presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, aseguró que las protestas en rechazo al juicio político en su contra seguirán los próximos días.
Rafael Rodríguez / El Político
La mandataria brasileña explicó que una movilización mayor es necesaria para "un golpe de este tamaño".
Anunció que esta semana lanzará una carta abierta tanto al Senado como a los brasileños, en el cual se comprometerá a apoyar un plebiscito para salir de la crisis política si la dejan volver al poder, mediante nuevas elecciones.
"Sólo puede haber una recomposición de la democracia en Brasil a través de la consulta popular", indicó Rousseff, aunque admitió que "puede ser difícil que pase".
"Realmente quiero ir. Dependiendo de las condiciones", manifestó. Sin embargo, debe esperar la respuesta del presidente del Tribunal Supremo, Ricardo Lewandowski.
La realización de un referendo dependería de la aprobación del Congreso debido a que si Rousseff vuelve al poder, no podría llamar a consulta mediante decreto.
Con información de Telesur