Marco Rubio, el secretario de Estado de Estados Unidos, ha exigido al presidente panameño, José Raúl Mulino, "cambios inmediatos" para contrarrestar la creciente influencia china en el Canal de Panamá.
Esta declaración se realizó durante una reunión celebrada este 2 de febrero en el palacio presidencial de Las Garzas, en Ciudad de Panamá. Rubio subrayó que el actual "statu quo" es inaceptable y que, si no se implementan cambios, Estados Unidos se verá obligado a tomar medidas para proteger sus derechos bajo el Tratado Relativo a la Neutralidad Permanente y el Funcionamiento del Canal de Panamá.
La administración de Donald Trump considera que la influencia del Partido Comunista Chino en la zona del canal representa una amenaza a la seguridad nacional estadounidense y una violación del tratado mencionado. Durante la reunión, Rubio comunicó a Mulino que Trump ha tomado una "determinación preliminar" sobre esta situación.
Mulino, por su parte, defendió la soberanía panameña, afirmando que el canal es operado por Panamá y que no hay posibilidad de renegociación sobre su control. En una rueda de prensa posterior, el presidente panameño describió la reunión como "altamente respetuosa" y aseguró que no ve una "amenaza real" de intervención militar por parte de Estados Unidos.
Además de discutir la influencia china, también se abordaron otros temas como la gestión migratoria y la lucha contra el narcotráfico, áreas donde Estados Unidos ha estado colaborando con Panamá.