Uno de los mayores crímenes que ha cometido Rusia en su invasión a Ucrania, lo es sin duda el haber colocado a millones de personas en todo el mundo, con grandísimas dificultades para adquirir sus alimentos.
El Político
El Departamento de Estado ha publicado una evaluación, independiente, realizada por el Observatorio de Conflictos, en el que deja al descubierto la monstruosidad cometida por el ejército de Putin.
La guerra injustificada de Putin contra Ucrania pone a millones de personas en todo el mundo en riesgo de aumentar la inseguridad alimentaria.
La invasión a gran escala del Kremlin a Ucrania, uno de los mayores exportadores de alimentos del mundo, ha provocado el daño o la destrucción total de muchas de las carreteras arteriales, ferrocarriles, puertos e instalaciones de almacenamiento de alimentos de Ucrania que son esenciales para llevar sus productos agrícolas a los mercados internacionales.
Estas acciones garantizan que el dolor de esta guerra también será sentido por las poblaciones más vulnerables del mundo.
Hoy, el Observatorio de Conflictos, que cuenta con el apoyo del Departamento de Estado de los Estados Unidos, publicó una evaluación independiente, primera en su tipo y detallada del impacto devastador de la guerra de Rusia en los sitios de almacenamiento de alimentos en Ucrania.
Se estima que el 15,7% de las instalaciones de almacenamiento de cultivos de Ucrania se han visto afectadas durante el conflicto, ya sea debido a la incautación por parte de las fuerzas rusas y alineadas con Rusia, o porque las instalaciones han sido destruidas, dañadas o degradadas hasta el punto de comprometer las existencias contenidas en su interior.
En el informe se señala que la destrucción intencional de esas instalaciones puede constituir un crimen de guerra y una violación del Protocolo adicional I de 1977 a los Convenios de Ginebra de 1949.
Por su parte, los Estados Unidos piden que se sigan investigando mediante mecanismos apropiados.
Este informe y otros análisis están disponibles en línea en el sitio web del Observatorio de Conflictos.
Rusia incrementa el caos
Rusia ha exacerbado una crisis de seguridad alimentaria mundial, ha contribuido a aumentos significativos en el costo del trigo y ha forzado una lucha para mantener alimentadas a las poblaciones hambrientas y vulnerables.
Este verano, las Naciones Unidas y Turquía mediaron en un acuerdo con Rusia y Ucrania para permitir exportaciones seguras de granos desde los puertos ucranianos del Mar Negro.
Desde el 1 de agosto, ese acuerdo ha reducido los precios mundiales de los alimentos y ha traído más de 2,7 millones de toneladas métricas de granos a los mercados mundiales.
Pero si la infraestructura agrícola dentro de Ucrania continúa siendo dañada en la guerra, este progreso en la seguridad alimentaria mundial estará en peligro.
La peor violencia en ocho décadas
En 2022, Ucrania se ha convertido en el escenario de la peor violencia a gran escala que Europa ha visto en ocho décadas.
Las dificultades locales se ven agravadas por la capacidad tensa de sus agricultores para operar durante la guerra, reponer los suministros de alimentos disminuidos y prepararse para las próximas temporadas de siembra.
Las ramificaciones de la agresión de Rusia reverberan mucho más allá de Europa, y ahora afectan la salud y el bienestar de decenas de millones de personas en todo el mundo.
Desde febrero, Estados Unidos ha proporcionado más de 5.700 millones de dólares en asistencia humanitaria para ampliar las operaciones de seguridad alimentaria de emergencia en países con inseguridad alimentaria.
Estados Unidos continuará apoyando firmemente a Ucrania mientras defiende su libertad, por el bien de su propio pueblo y de las personas de todo el mundo que dependen de las cosechas de las tierras de cultivo de Ucrania.
Nuestro apoyo a Ucrania sigue siendo inquebrantable.