El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha dicho que espera que Rusia intensifique sus ataques contra su país, específicamente en Lugansk.
El Político
Las fuerzas rusas están cada vez más cerca de apoderarse del último foco de resistencia en la región de Luhansk, en el este de Ucrania, con batallas en Severodonetsk y cerca de su ciudad hermana, Lysychansk.
Las ganancias rusas han sido costosas, dicen los analistas, con muchas bajas y pérdidas de equipos, lo que llevó a la inteligencia de defensa británica a predecir que el impulso de Moscú se desacelerará en los próximos meses.
"Tenemos una situación extremadamente difícil en todo el frente de Lugansk. Los enemigos están lanzando una ofensiva a gran escala en nuestra región, han acumulado un número suficiente de reservas, señaló el gobernador, Serhiy Gaidai.
Gaidai admitió por primera vez que en Severodonetsk los combates se han centrado en la zona industrial y que "las tropas ucranianas controlan sólo el territorio de la planta de Azot". Hasta ahora se había negado pese a que lo venían anunciando desde hace varios días las fuerzas prorrusas.
El estadounidense Instituto de Estudios de la Guerra (ISW) constató que "esta semana será decisiva para los esfuerzos rusos por tomar el control de Severodonetsk". La viceministra de Defensa de Ucrania, Hanna Malyar, indicó que Rusia se fijó el 26 de junio como fecha límite para lograr el control total de Lugansk.
La situación en Lisichansk
Un esfuerzo que se observa particularmente en la vecina ciudad de Lisichansk, cuyas alturas son aprovechadas por el Ejército ucraniano para atacar al Ejército ruso en Severodonetsk. Dada la complejidad de la situación el propio presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, visitó esta ciudad "en secreto", donde incluso estuvo bajo fuego ruso, según informó la diputada ucraniana Mariana Bezugla.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Igor Konashénkov, afirmó que "la agrupación de tropas ucranianas en el área de Lisichansk está aislada de suministros y está bajo el control de fuego de las Fuerzas Armadas rusas".
Mientras, las tropas rusas mantienen su avance, según constató a la televisión rusa Andréi Marochko, oficial de las milicias separatistas de Lugansk, al señalar que los prorrusos ya están a las puertas de Lisichansk.
"Podemos observar esta localidad sin necesidad de equipos ópticos, y naturalmente, esto permite a nuestras unidades ‘trabajar’ mejor. Es más, los medios de detección y exploración ya cubren totalmente esta localidad", dijo.
La caída de Lisichansk, según el "embajador" en Rusia de la región separatista de Lugansk, Rodión Miroshnik, coincidirá en el tiempo con la toma de Azot, ya que se trata de "procesos interrelacionados".
Señaló que las fuerzas rusas "avanzan activamente desde el sur en dirección a Lisichansk", y adelantó que el equilibrio de fuerzas en esta zona sufrirá "cambios significativos en las próximas horas".
Fuente: Página 12