Luego de su sorpresivo despido, Sam Altman, el cofundador de la compañía OpenAI creadora del ChatGPT, regresará al proyecto como director ejecutivo de la empresa.
El Político
El viernes 17 de noviembre, OpenAI, la firma tecnológica que desarrolló el sistema de inteligencia artificial (IA) ChatGPT, anunció públicamente el despido de Sam Altman, su director ejecutivo, alegando que su junta directiva ya no confiaba en su " capacidad para seguir liderando OpenAI”.
El despido del cofundador de la empresa se oficializó luego de que se hiciera público un comunicado donde informaban que, tras una revisión de su junta directiva, habían llegado a la conclusión de que Altman “no fue consistentemente sincero en sus comunicaciones” con los directivos, “lo que obstaculizó su capacidad para ejercer sus responsabilidades”.
Tras la salida de Altman se esperaba que Mira Murati, directora de tecnología de la compañía, tomará el puesto con efecto inmediato, mientras llevaban a cabo un proceso para elegir un nuevo director ejecutivo. Sin embargo, con menos de una semana desempleado, Sam Altman volvería a la empresa tecnológica.
El acuerdo, dado a conocer este miércoles, 22 de noviembre, por la compañía tecnológica, también implica "en principio" el nombramiento de nuevos miembros de la junta directiva de la empresa y la reincorporación del cofundador de OpenAI.
"Estoy deseando volver a OpenAI", escribió Altman en una publicación en la red social X, anteriormente Twitter.
Altman dijo que esperaba trabajar con una junta reformada y añadió que la empresa aprovecharía su "fuerte asociación con Microsoft".
Altman regresa como director ejecutivo, y la junta directiva inicial estará dirigida por Bret Taylor, ex codirector ejecutivo de Salesforce Inc. Los otros directores son Larry Summers, ex secretario del Tesoro de Estados Unidos, y el miembro actual Adam D’Angelo, cofundador y director ejecutivo de Quora Inc, según informó Bloomberg.
Bloomberg reporta que la decisión de reincorporar a Altman a la startup de IA más conocida del mundo representa una importante victoria para Microsoft Corp., que trabajó con otros inversionistas para revertir su despido. Su director ejecutivo, Satya Nadella, apoyó públicamente a Altman durante todo el revuelo y accedió brevemente a contratarlo en Microsoft para crear un nuevo grupo de investigación interno.