El país pretende elevar los ingresos no procedentes del petróleo y las telecomunicaciones son clave para conseguir este objetivo. La compañía Saudi Telecom pilota el proceso y se vuelca en servicios digitales.
En el futuro puede que Arabia Saudí dependa más de los datos que del petróleo, si el consejero delegado de su empresa estatal de telecomunicaciones consigue sus objetivos.
Khaled Hussain Biyari, consejero delegado de Saudi Telecom Company (STC), cree que la firma desempeña un papel fundamental para reducir la dependencia económica del petróleo y transformarse en un vivero tecnológico en la región y un centro fundamental para empresas estadounidenses como Facebook o Google.
Biyari afirmó que su compañía será una "pieza clave" en la transformación económica, puesto que es la principal fuerza en el mercado saudí de telecomunicaciones. "La dependencia del petróleo es una maldición," aseguró.
El ejecutivo hizo estas declaraciones durante una conferencia en Londres a inversores institucionales que desean beneficiarse del plan del país para aumentar los ingresos no procedentes del petróleo de 163.000 millones de riyales saudíes (41.000 millones de euros) al billón de riyales en 2030. También quieren aumentar la cotización del sector privado del 40% al 65% del producto interior bruto.
El objetivo del Gobierno saudí quedó patente con la decisión del príncipe Mohammed bin Salman al-Saud de actuar como socio intermediario con el fondo de inversión en tecnología de 100.000 millones de dólares de SoftBank en Londres, que se ha comprometido a invertir 45.000 millones de dólares en los próximos cinco años.
Esto ha repercutido en STC, que quiere transformar su empresa de telecomunicaciones en una compañía de servicios digitales. "Las telecos tienen dos opciones: cambiar y evolucionar a firmas digitales o convertirse en empresas de servicio público. Hemos escogido la primera alternativa," declaró Biyari.
Puede que Arabia Saudí no tenga fama de potencia tecnológica, pero STC cree que gracias a la población joven y a los hábitos digitales posee lo que los desarrolladores necesitan. Su consejero delegado afirmó que el 50% de la población tiene menos de 30 años y que es el país que más datos consume del mundo. "¿Es un consumo productivo? La mayoría lo usan para su entretenimiento, pero demuestra que la población está preparada," añadió.
Karim Yaici, analista de la consultora Analysys Mason, señala que STC ya ha comenzado a invertir en start up como la página web de finanzas Compareit4me y la aplicación para solicitar coches Careem.