El hombre que sembró el pánico con un ataque armado en un hotel de Manila que ha dejado decenas de heridos se suicidó prendiéndose fuego antes de ser capturado, informó la Policía.
"Evaluamos que se prendió fuego. Cometió suicidio", declaró el jefe de la Policía de Manila, Oscar Albayalde, en una entrevista radiofónica difundida por la cadena local ABS-CBN.
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El ataque se produjo a medianoche en el Resort World Manila, que alberga un cine, un casino y una galería comercial, y es un complejo hotelero y de entretenimiento cercano al aeropuerto Ninoy Aquino, al suroeste de la capital filipina.
La policía emprendió la búsqueda del atacante, que salió del complejo tras quemar mesas de juego con gasolina, intentar robar fichas del casino y disparar, causando al menos 30 heridos, ninguno grave.
Las lesiones fueron en su mayoría producidas por la estampida general tras el ataque y no por los disparos o el fuego, informó la policía.
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Testigos relataron que algunas personas saltaron por la ventanas al escucharse los primeros disparos.
El Estado Islámico (EI) reivindicó la acción pero la policía filipina cree que el móvil fue el robo y ha rechazado la posibilidad de un atentado terrorista.
EFE
