Al menos seis niños murieron y otras 40 personas resultaron heridas por un bombardeo contra un jardín de niños en la ciudad siria de Harasta durante la hora del recreo, al parecer perpetrado por fuerzas leales al presidente Bashar al Assad.
El opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) denunció que las instalaciones de colegio de educación preescolar fueron bombardeado este domingo bárbaramente, al parecer por aviones de combate de las fuerzas leales al régimen de Al Assad.
"Seis niños han muerto y decenas de personas más resultaron heridas, 17 de ellas niños, por el bombardeo en la ciudad rebelde de Harasta (un suburbio rural de Damasco)", subrayó el OSDH, que cuenta con una red de monitores en Siria para informar sobre el conflicto armado.
El bombardeo se registró poco después de las 10:00 horas locales (08:00 GMT), en momentos en que decenas de pequeños estaban jugando durante su primer descanso del día en el patio y un vivero del kínder.
El OSDH, oficina de información de la oposición siria, difundió junto con su reporte varias fotografías desgarradoras de los cuerpos de los niños y de otros cubiertos de sangre, así como de varios juguetes que quedaros destrozados por el patio y la zona de juegos del colegio.
El activista Mohammed Adam dijo al sitio de noticias Directo de Siria que ocho personas, seis de ellos niños, murieron como consecuencia de los bombardeos y otros 25 fueron trasladados al hospital para recibir tratamiento por lesiones, muchos de ellos en estado crítico.
Adam aseguró que uno de los niños muertos era hijo de un rescatista de la Defensa Civil Siria (SCD, por sus siglas en inglés), una organización de voluntarios para la protección y asistencia humanitaria mejor conocida como los "Cascos Blancos", aunque la organización no lo ha confirmado aún.
En la actualidad, el suburbio de Harasta, situado en el borde de la ciudad occidental rebelde de Ghouta, está divida entre el ejército sirio y las fuerzas rebeldes que luchan contra el régimen por el control del sur y oeste de la ciudad, incluyendo la carretera que lleva a Damasco.
"Se espera que el número de víctimas aumente", dijo el portavoz de la Defensa Civil Siria (SCD, por sus siglas en inglés), tras confirmar que muchos de los niños heridos están en estado critico.
El bombardeo contra el jardín de niños de Harasta ocurrió en el mismo día en que la organización Human Rights Watch (HRW) emitió una declaración para condenar el ataque aéreo del pasado 26 de octubre contra una escuela de la provincia de Idlib, que es controlada por la oposición siria.
En la declaración, Bill Van Esveld, investigadora de derechos de los niños de HRW, pidió a la comunidad internacional trabajar para poner fin a las víctimas civiles en el conflicto sirio. "De lo contrario, sirios escolares y otros continuarán sufriendo", destacó.
Según estimaciones del OSDH, al menos 74 civiles, entre ellos 25 niños, han muerto en los últimas 24 horas a causa de la ofensiva militar que lanzó el gobierno sirio la semana pasada contra la oposición en el oeste de la asediada ciudad de Alepo.
El conflicto armado en Siria inició el 15 de marzo de 2011 con una protesta contra el régimen del presidente Al Assad y se convirtió en una guerra civil, que ha dejado al menos 310 mil muertos, más de dos millones de heridos y cerca de 12 millones de refugiados y desplazados internos.
Con información de Terra