El alarmante aumento de ciberataques a empresas durante la pandemia incrementó la cantidad de puestos de trabajo en ciberseguridad.
El Político
Solo en 2021 los ataques de ransomware aumentaron un 150%, según una encuesta del Foro Económico Mundial. De ahí, la importancia del trabajo de los hackers éticos para proteger a las empresas.
Estos profesionales utilizan técnicas de Pentesting (test de penetración de sistemas): buscan vulnerabilidades en los sistemas de las empresas utilizando su conocimiento experto y empleando las mismas herramientas que un hacker malicioso, pero con el objetivo de analizar su nivel de seguridad y de exposición ante posibles ataques.
¿Qué hace un hacker ético?
Los llamados “hackers de sombrero blanco” utilizan los modos creativos y contraintuitivos de los hackers para prevenir que estos criminales cibernéticos se roben dinero e información privada.
Las empresas necesitan cada vez más de hackers éticos porque, en un contexto de gran hostilidad, son los únicos profesionales con los conocimientos técnicos necesarios para proveer soluciones en ciberseguridad.
Cómo es ser hacker ético
El servicio de ciberseguridad tradicional es burocrático y costoso, lo que hace que sea difícil e ineficiente tanto para contratarlo como para brindar una experiencia ágil y personalizada.
En este sentido, la plataforma global Strike ofrece un producto que se adapta a las diferentes necesidades de cada compañía, ayudando a que cada una se encuentre protegida sin importar su tamaño, industria o madurez.
Para esto, la compañía cuenta con una comunidad global de Strikers, que agrupa a los hackers éticos más talentosos y reconocidos del mercado para que realicen los pentesting.
Estos hackers que usan sus habilidades para el bien común se encuentran distribuidos en todo el mundo, son especialistas en diferentes tecnologías e industrias y poseen certificaciones de instituciones reconocidas internacionalmente.